Vuelve Aterciopelados: "Nos perdonamos"
En julio pasado, en el escenario del festival Rock al Parque y ante 130 mil personas, Aterciopelados dio la primera señal concreta de una reconciliación. Luego de tres años separados, el exitoso dúo colombiano decidió limar sus asperezas y dejar atrás lo que su vocalista define como "una pequeña pelea".
"Nos hicieron una propuesta chévere del festival y gracias a eso volvimos a conversar. Nos perdonamos, nos amigamos y empezamos a ensayar", resumió a La Estrella Andrea Echeverri, cantante y guitarrista del grupo bogotano que, antes de Shakira y Juanes, llevó la música colombiana a todo el continente.
Tras emprender sus respectivos proyectos en solitario, y abuenarse, la vocalista y su compañero Héctor Buitrago ahora tienen toda una gira de regreso programada en la región, que el próximo 15 de noviembre llegará al Club Hípico de Santiago. Allí, en el Festival Frontera, revivirán juntos los éxitos que los convirtieron en íconos del MTV de los años 90, como "Bolero falaz" y "Florecita rockera".
- Cuando llevas muchos años te gusta tocar lo último, no tanto las canciones viejas. Ahora esto lo empezamos como un juego, no tratamos que suene igual sino que suene como hoy. Yo al principio no le tenía mucha fe, pero está bueno.
- Esta reunión tiene más que ver con el recuerdo, con una celebración del pasado. Cada uno sigue con sus proyectos solistas, aunque han ido saliendo más propuestas para Aterciopelados, como grabar un DVD en vivo y quizás después un disco nuevo. En noviembre además se lanza un libro del grupo ("Con el corazón en la mano"), que es como un túnel del tiempo, con recortes de prensa, fotos, postales... en vez de las peleas me acordé de todas las cosas que hemos hecho juntos, y ahora otra vez me siento con mi amigo y es rico.
- Hay recuerdos buenos y recuerdos malos.
Cuando tocamos con los (Fabulosos) Cadillacs en Reñaca... era como una manada de zombies (una guerra de arena que terminó con decenas de detenidos). Y luego lo de Cypress Hill (en el Caupolicán en 1996), que nos escupieron, fue terrible.
- Héctor quizás sí, pero yo soy mamá, tengo una hija adolescente de 12 y un chiquito de 6, entonces mis viajes no los alargo mucho. J