Se informó del avistamiento de dos aletas de tiburón en las costas de Cachagua y de inmediato algunos se empezaron a pasar películas y se juraban protagonistas de la saga de Steven Spielberg, tanto que hasta comenzó a circular la foto de un tiburón peregrino varado en la arena, afirmado por unos buzos.
Pasado el mediodía la imagen comenzó a dar vueltas por Twitter, pero a medida que fueron pasando las horas surgió información oficial del tema que desmentía aquella imagen. El capitán de puerto de Quintero, Sebastián Sepúlveda, aseguró que la foto era falsa y que ningún tiburón había llegado a la arena.
"Lo concreto es que las patrullas en terreno no han dado con ningún varamiento de tiburones. De lo único que se tiene certeza es del avistamiento de dos aletas dorsales de tiburón. Estamos patrullando el área vía terrestre, marítima y con helicóptero para ver si avistamos nuevamente. La primera en verlo fue la salvavidas de la playa Las Cujas", relató Sepúlveda.
Equipos de la Armada y de Sernapesca ayer recorrieron la zona incluso con apoyo aéreo, sin encontrar nada. A pesar de eso, y como una medida de prevención, se determinó el cierre de las playas de Zapallar, Cachagua y Las Cujas. Personal de la municipalidad de Zapallar pidió a los bañitas que salieran del agua, pero la mayoría se mantuvo en la arena.
El capitán Sepúlveda comentó que personal de la Armada intentó contactar a las personas que subieron videos y fotografías del supuesto tiburón a internet, pero no pudieron dar con alguien que se hiciera responsable de las imágenes. "Ese material tiende a confundir y eso obviamente alarma a la población", comentó.
¿lo pescaron?
En el recorrido por la zona, personal de Sernapesca entrevistó al pescador de la caleta de Zapallar, Claudio Cisternas quien aseguró haber capturado un tiburón, junto a otros colegas, la mañana de ayer. "Fuimos a tirar las redes al sector que se llama 'Las Batallas' y hoy día (ayer), como a las 7 de la mañana, empezamos a levantar. Un compañero mira y ve que pillamos al tiburón en la red. Estuvimos más de media hora tratando de desenredarlo y lo dejamos amarrado al bote, pero era tan grande que no nos dio para traerlo".
Según Cisternas el pez medía siete metros de largo y era tan pesado (unos 1.500 kilos según él) que el motor del bote no se lo pudo. "Lo tuvimos amarrado unos 50 minutos y cuando vimos que era muy pesado para el bote decidimos cortar el amarre... se fue altiro al fondo, se notaba que estaba muerto, de otra forma habría pataleado".
El relato de este pescador es respaldado por una serie de videos que muestran el animal amarrado al bote y que ayer fueron subidos en la página web de UCV Radio. Ahí se ve que es un animal de piel blanca y que no pudo ser remolcado hasta la orilla por su gran peso. J