Treinta y cinco semanas de embarazo gemelar y síntomas de parto prematuro tenía Homayra Preece, de 22 años cuando fue trasladada desde el hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar a la Clínica Las Condes en Santiago de urgencia al no haber cuna en neonatología para recibir a sus pequeñas.
Ahí estuvo cinco días hasta que el 20 de diciembre, en la mañana, nacieron por cesárea dos pequeñas. "Las niñitas nacieron bien; una quedó en incubadora y la otra sólo con luz para la ictericia, pero me decían que las dos estaban súper bien, los exámenes estaban bien, de pulmones, ecotomografía cerebral, de sangre, un montón de exámenes y todos bien", relató la joven de Villa Alemana.
el traslado
Los primeros dos días estuvieron con suero y luego con leche materna que les daban por sonda.
El 24 de diciembre, Homayra Preece fue dada de alta y las niñas fueron trasladadas al hospital de Quilpué, donde comenzó el calvario del joven matrimonio.
"Las niñitas llegaron en incubadora. Como a las siete de la tarde la matrona me dijo que llegaron bien y le dije que me sacaría leche. La matrona me dijo que no era necesario y que se alimentarían con relleno; insistí, pero me dijo que no, que me fuera tranquila y que en la noche me sacara. Cuando volví a las once y media de la noche con mi marido, en la neo habían hecho una cena de navidad y no había nadie con las guaguitas. La Victoria, que era la más chiquitita, estaba muy vomitada. Le avisé a la matrona y me dice 'limpiela pues' sin siquiera mirarla. La niña se veía bien y a las doce y media de la noche , nos fuimos", relató la joven madre.
Navidad fatal
A las 11.30 de la mañana recibieron un llamado diciéndole que Victoria había sido trasladada al hospital Fricke,que había hecho heces con sangre y que estaba en estado crítico.
"En Viña hicieron todo lo posible por salvarla, le hicieron una radiografía y tenía todo reventado por dentro. Al ratito falleció de una enterocolitis necrozante, que es una bacteria que se da en los prematuros, pero a ella se le hizo ese examen en la Clínica Las Condes y no la tenía, llamamos al pediatra de Santiago y nos dijo que era imposible porque ya habían pasado muchos días desde que había nacido la niña y que la enfermedad no la tenía. Una de las causas es el relleno...", relató.
Desde entonces buscan sin resultado saber qué paso con su hija en el hospital de Quilpué durante las horas que ellos no estuvieron; cuál es el resultado de la necropsia y qué dice la ficha médica; cuáles fueron los síntomas que presentó la niña; a qué hora, pero a la fecha no han logrado nada, solo evasivas.
"Después de mucho movernos logramos que nos recibiera el director, pero nos dijo que no era responsabilidad de ellos, sino que de Viña y que allá teníamos que pedir la auditoria; de la ficha médica no se nos informó de nada. En la neo, una de las que estuvo en el turno me dijo 'no puedo hablar, pero fue terrible', con los ojos llenos de lágrimas. ¿Qué fue tan terrible?, ¿Qué fue lo que pasó con mi hija?", son las preguntas que nadie le contesta. J