Flotando en Las Torpederas hallan a joven desaparecida
Un dramático final tuvo ayer la frenética búsqueda de una joven madre playanchina que se encontraba desaparecida. Su cuerpo apareció flotando en playa Las Torpederas y ahora se indagan las circunstancias que rodearon su abrupta partida.
A través de las redes sociales y medios de comunicación, este fin de semana se dio a conocer el caso de Ana Valentina Caucoto Ruiz, 22 años, asistente de educación del Centro de Educación Especial Bellavista de Valparaíso. A la joven, madre de un menor de 4 años, la vieron por última vez cerca de las 23.15 horas del pasado viernes 10 de julio en las afueras del tradicional bar Roma, frente a la casa central de la Upla. Vestía pantalón negro, chaqueta floreada y zapatos con tacos negros. Al no llegar a su casa los familiares comenzaron a rastrearla, y de acuerdo a lo señalado por el mayor Cristián Millar, jefe de la Primera Comisaría Sur de Playa Ancha, la tarde del sábado el progenitor llegó a la unidad policial a interponer una denuncia por presunta desgracia. "Esta joven el día viernes por la noche al parecer se iba a juntar con su ex pareja en el sector del bar Roma y ayer desafortunadamente apareció sin vida en Las Torpederas", dijo el oficial.
Según lo informado por el Capitán de Puerto, capitán de fragata Nelson Saavedra, a las 10.15 horas un testigo alertó a personal naval que un cuerpo flotaba en las frías aguas del balneario. Llegó una patrulla para rescatarla por la playa pero no fue posible sacarla por las marejadas y el viento y lluvia reinante, y con una lancha LPM Arcángel, con apoyo de voluntarios del Cuerpo de Rescate del Bote Salvavidas, consiguieron transportarla hasta la orilla. Era una mujer descalza que mantenía un pantalón negro y un peto con motivos florales, las mismas características de la desaparecida Ana. El padre y una amiga de la joven la reconocieron casi de inmediato al salir del agua. Personal naval resguardó el cuerpo hasta la llegada de peritos del Laboratorio de Criminalística y la Brigada de Homicidios, encargados por el Ministerio Público para indagar el caso. Mientras los detectives realizaban sus pesquisas, al balneario llegaron familiares, amigos y compañeras de trabajo de la occisa, los que en medio de su tristeza no daban crédito a su inesperada partida. "Ella estudiaba y trabajaba. Era una niña tranquila y madre de un hijo", dijo escuetamente una de sus parientes.
El subcomisario Walt Dapremont, oficial investigador de la BH, dijo que junto a Lacrim fijaron el sitio del suceso en forma planimétrica y fotográfica, y realizaron una inspección ocular al cuerpo. Indicó que en primera instancia el cadáver no presenta lesiones atribuibles a terceros, pero será la autopsia la que develará la causa del deceso y la data de muerte. Esto porque los fenómenos cadavéricos se alteran con el agua y no es posible determinar si falleció por una asfixia por inmersión u otra situación. Trascendió que una de las amigas de Ana mantenía en su poder información de Wassap que sería relevante para la investigación. J