Lola porteña dice que la drogaron con una "gomita" para abusarla
Primero fue el caso de la rosa azul en Viña del Mar. Luego vino el cepillo de dientes en el plan porteño. Ahora apareció un nuevo método para drogar y robar o abusar de mujeres.
La víctima es una menor de 14 años, domiciliada en Playa Ancha. Su madre M.J.F., de 32 años, relató que, como lo había hecho en ocasiones anteriores, la joven fue a ver a su abuela en Achupallas. Cuando se aprestaba a regresar, en un paradero se topó con un ex compañero de curso de un par de años atrás, cuando vivía en la Ciudad Jardín. En medio de la amena conversación, el muchacho gentilmente le ofreció un dulce tipo gomita, con líquido en el centro. Confiada, ella se lo comió y tras unos minutos, cuando quiso despedirse para retornar a su hogar, comenzó a marearse y sentirse mal.
El adolescente la instó a que fueran a su domicilio en las cercanías, para que tomara agua y pudiera reponerse. "Allí no recuerda nada. Tiene sólo algunos lapsos en su mente como si fuera una película, de que ambos están en la casa, pero nada más recuerda", dice la madre. La escolar tiene noción de verse caminando junto a su ex compañero hacia el paradero. En el camino se toparon con el padre del adolescente. La muchacha llegó tarde a su casa, con dolor de cabeza, pero no informó a sus padres de lo acontecido.
Al cabo de unos días los progenitores fueron llamados desde el colegio de su hija, donde una profesora les habló de la sospecha de un posible embarazo. Allí la escolar, que antes no habló por vergüenza y miedo, les contó el episodio. Ellos en forma inmediata la llevaron hasta el hospital Carlos Van Buren, donde fue revisada en el servicio de urgencia de Ginecología. Allí se descartó la existencia de un ataque sexual, y obviamente de un estado de gravidez.
"Tiene que haber estado tan drogada que cuando le trataron de hacer algo en forma inconsciente se defendió. Eso no quiere decir que no haya sido abusada", agrega M.J., quien reconoce con su marido pensaron en buscar al responsable, pero optaron por dejar todo en manos de la justicia. El caso ya es investigado por la Fiscalía a través de la PDI.
Aunque saben que por ser menor no tendrá una sanción importante, la familia seguirán adelante. "Cuando leí el caso del cepillo de dientes quedé plop y le dije a mis hijas que no reciban nada en la calle. En el hospital me dijeron que no era el primer caso con este método de la gomita. Quizás debe estar haciéndolo con otras niñas", dijo la mujer. La víctima recibe apoyo sicológico en su plantel educacional. J