Karen Cortés, la voz de la tarde en Bío Bío: 'Nadie me ha regalado nada'
Con 32 años la conductora de Espacio Libre cuenta de sus inicios en la radio, cuando el pago era el muchas gracias y había que caminar y caminar buscando auspiciadores.
Quien lo diría pero Karen Cortés Schlapnik, la voz femenina de Espacio Libre de Bío Bío nunca pensó que haría radio. Al menos no estaba en sus planes, como muchas cosas en la vida. Es que las experiencias hacen que el planificar no esté en su mente y lo único que cruzó como objetivo en su vista fue ser madre, y lo logró al dar a luz hace tres años a Galit.
Pero la historia de la mujer ancla de radio Bío Bío Valparaíso abunda en detalles y con La Estrella no se guardó nada.
Estudió Locución y Conducción de Radio y Televisión en la Aiep, donde llegó simplemente porque buscaba una carrera fácil y rápida. No le gusta estudiar y había dejado fotografía a mitad de camino.
En el estudio un profesor la recomendó para radio Carolina y ahí se instaló. Debió entender que el mundo era más que Gustavo Cerati y subirse a una radio de liderazgo probado en los jóvenes, "estuve como seis meses, pagándome la micro y sólo por la experiencia de aprender hasta que la radio cerró la región, me dijeron gracias por tu aporte y chao. Fue una práctica", recordó. Cómo lo hizo con la música, recuerda que debió aprender, "soy un poco perna, nunca he sido carretera, muy sociable, entonces esas cosas en una radio así te obligaban a esfortarte".
Luego de eso vino Vox en San Felipe todos los sábados, donde tenía asegurado el pago del viaje y el almuerzo. Para Karen todo era complicado, por eso dice ya a sus 32 años que "todo me lo he ganado trabajando duro, nadie me ha regalado nada".
Y luego quiso ganar algo. Preguntó en radio Portales por el arriendo de un espacio y salió a buscar auspiciadores, "me caminé todo Viña buscando patrocinadores para un espacio en AM. Sumando y restando con suerte gané 200 lucas", dice.
De colada a bío bío
A radio Bío Bío llegó de colada. Claro porque fue una amiga que golpeó esa puerta y en el demo que presentó salía su voz. Preguntaron por ella y quedó, su amiga no. Estuvo haciendo cuanto programa existe, y en el medio hasta pituteó leyendo el tiempo en UCV Televisión. Todo un tema para alguien que, confiesa, no gusta preocuparse mucho de su pinta, "me fijo del peso, pero la ropa, el pelo, esto y lo otro no". Estuvo seis meses.
Pero la radio consumía su tiempo y eso le pasó la cuenta. El amor le dio un portazo y si querer fue en el locutorio en donde encontró una segunda oportunidad: Mauricio Barrientos, el mismo que conduce en la misma radio hoy Expreso Bío Bío, y que además es su jefe. "Nos fuimos conociendo en el día a día. Tú con tus compañeros pasas más tiempo que con tu familia, y se fue dando. Ambos veníamos de historias de rupturas de años, veníamos de dolor. Nos ayudamos en esa etapa, y ahí nació todo".
Hoy ambos son padres de Galit -significa olas de mar y soporte y es de origen Hebreo- con quien viven y a quien se suma los fines de semanas los dos hijos de Mauricio. Trabajar con el jefe, Karen se hace cargo de los pelambres. "Hoy me dan lo mismo, pero hace algunos años me molestaba. Pero como me dijo mi jefe Tomás Mosciatti, 'qué te importa lo que digan los demás porque tu sabes por qué estás en esta radio'",
Y se extiende, "siempre ha sido mi jefe, yo llegué a la radio en 2008, en pareja y cada uno tenía su vida, y después se fueron dando y sigue siendo mi jefe. En la casa mando el 70% yo, y en la pega él todo el rato, pero a mi me exige más porque me conoce más, es súper duro conmigo, crítico, y eso a veces cansa".
De pocos amigos, Karen encontró en el running un nuevo aire. Está en You Can Run con Hardy Matamala y ya sumó sus primeros 10K, "me cambió la vida, me mejoró la salud", confiesa y se va, sus auditores la esperan y ella, es feliz cada tarde acompañándolos.