Claudio Morales S. - La Estrella de Valparaíso

Ya sea para congraciarse con una hinchada quillotana que no mira con buenos ojos su gestión, para sacar máximo provecho de la localía en el clásico, o como simple "devuelta de mano" por lo que pasó en el Derby provincial del torneo anterior en el "Nicolás Chahuán"; los dirigentes de San Luis consiguieron el beneplácito de las autoridades para jugar este domingo (14.45 horas) ante Unión La Calera sin venta de entradas para la hinchada visitante. Para quienes deben velar por la seguridad del espectáculo la medida les acomoda: sin barras antagónicas menos problemas.

Los fanáticos caleranos se habían acostumbrado a teñir de rojo la Tribuna Pinto en los dos últimos partidos de local que jugaron en Quillota, pero mañana tendrán que mirar por la TV el desarrollo del nuevo choque entre San Luis y Unión La Calera. Será el cuarto y último duelo de esta temporada entre amarillos y rojos, y los canarios han sentado paternidad con dos victorias y un empate, entre Copa Chile y Apertura.

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En las huestes de Miguel Ramírez, la confianza no decayó tras el partido del martes ante Huachipato, sino todo lo contrario, pues el punto rescatado en el sur les da la posibilidad de alcanzar en la Tabla Acumulada a sus archirrivales (en 25 puntos) y superarlos por diferencia de gol, si es que se hacen de la victoria y cortan así una racha de cuatro empates consecutivos.

Ante la expectativa que ha generado en la ciudad el duelo de mañana ante Unión La Calera, el técnico de los canarios espera que "la disposición de la gente en este partido sea como nosotros esperamos, vale decir, con estadio lleno, donde vengan a aportar como lo han hecho hasta el día de hoy. Nos han apoyado desde Arica hasta Talcahuano, la gente siempre ha estado con nosotros y sería bueno ver el estadio lleno, pintado de amarillo", expresó "Cheito", pese a que la campaña ha sido irregular y la gente no se merece que estemos donde estamos en la Tabla", agregó Marco Estrada.

El volante mundialista también expresó su aprensión por el arbitraje, que en este caso será del juez FIFA, Patricio Polic. "Espero que después del partido se hable de lo que propusieron en la cancha San Luis y Calera, y no del desempeño del árbitro. Tendremos que manejar la ansiedad y no terminar con uno o dos menos como viene siendo la tónica. En lo futbolístico, debemos dar el primer golpe", advirtió el zurdo.

La formación de San Luis no debería presentar muchas variantes, aunque Federico Martorell y hasta Alejandro Fiorina podrían dar una sorpresa y reaparecer el domingo.

A abstraerse

Los jugadores de Unión La Calera debieron sacarse muy rápido la bronca tras el empate que regalaron el sábado pasado ante palestino estando estos con nueve jugadores. Debían enfocarse en el clásico y trabajar en las variantes en la oncena que el entrenador Leonardo Ramos va a introducir. La más lógica es la reaparición de Lucas Giovini, quien recupera el arco tras cumplir una fecha de suspensión. Suspensión que debe cumplir ahora el volante Agustín González (cumplió 5 amarillas). Su reemplazante, casi por aclamación popular, sería Eduardo Farías. En ofensiva, los trasandinos Patricio Vidal y Matías Castro podrían ser novedad, más aun si aparecen como dupla y dejan más atrás, como abastecedor, a Matías Arrúa.

El que sí o sí va en el medio, es el uruguayo Maximiliano Bajter. El ex The Strongest indicó que "sabemos que es un clásico y son partidos para ganarlos. Más aun en la posición en que estamos, en realidad los dos, tratando de no descender a falta de 4 fechas. Tenemos que demostrar mucho carácter y si a eso le sumamos buen juego, tenemos grandes posibilidades de quedarnos con los tres puntos". El mediocampista central opinó sobre jugar sin los hinchas caleranos. "Es una lástima, siempre es bueno tener a nuestra gente apoyándonos. El otro día con Palestino fue muchísima gente y a nosotros nos hace bien eso. Seremos visitantes, pero eso no tiene que cambiar lo que hagamos".