Redacción - La Estrella de Valparaíso
A tablero vuelto, con presencia de vecinos, dirigentes, representantes de empresas, bomberos, personal de Armada, Onemi y de diversos organismos públicos y de emergencia, este viernes el destacado geógrafo y doctor en Ciencias Ambientales, Marcelo Lagos, realizó una interesante conferencia en el Auditorio de Puerto Valparaíso.
Con el título "Magnitud e impacto de tsunamis en Chile y sus Puertos", el mediático experto repasó diversas experiencias de tsunamis ocurridos en Chile y en otros países del mundo, explorando sus potenciales impactos "y las condiciones de vulnerabilidad del borde costero que hacen que se detonen o no desastres", según explicó.
Con especial detención se centró en el caso de Valparaíso, analizando el evento de tsunami ocurrido el 8 de julio de 1730, que en ese entonces inundó partes relevantes de la ciudad. Lagos analizó el escenario actual, señalando que la presencia del puerto y de otras construcciones y estructura en el área inmediata al borde costero hoy representaría una barrera natural para atenuar eventuales catástrofes como la acontecida hace casi 3 siglos.
"Una pregunta que es permanente y que aparecía en la charla, es este mito o aseveración que Valparaíso es particularmente especial y que eso hace que los tsunamis no sean importantes aquí por características especiales de su bahía. Lo que expliqué es que la bahía de Valparaíso no la hace inmune a los tsunamis y el mejor ejemplo es que lean un poco de historia y revisen lo que pasó para el tsunami del 8 de julio de 1730, donde un tsunami fue muy destructivo e inundó toda la zona de El Almendral", indicó Lagos.
Barrera
El geógrafo de la PUC agregó que "sin embargo, el escenario hoy claramente se ve atenuado por un nuevo desarrollo urbano y particularmente por el rol que cumple el puerto. El puerto tiene varios impactos y externalidades positivas en Valparaíso, como un generador de empleo, como una institución que aporta al PIB, pero particularmente desde el punto de vista estructural permite atenuar potenciales fenómenos que vengan desde el mar y eso hace que el uso residencial o los usos de suelo más expuestos en zonas interiores ven en el puerto la posibilidad de una barrera artificial que podría darles más tiempo para escapar, que disminuye parámetros hidrodinámicos asociados a inundaciones producidas por tsunamis, y que de alguna forma protege las partes bajas de El Almendral ante futuros eventos. Nadie imagina Valparaíso sin el puerto. Valparaíso es el puerto, y el puerto hay que mirarlo obviamente como un elemento positivo ciertamente en su bahía", detalló.