Manuel Gómez Poblete
Más allá del resultado -ya que se ganó al final por 2 a 1, con un polémico penal convertido por Arturo Vidal en el décimo minuto de descuento (efectivamente... a los 100' de juego)- lo que dejó anoche el agónico triunfo de Chile ante Bolivia fue a decir verdad poco, muy poco.
Y es que una victoria como la de ayer -en un grupo que a priori, era catalogado por todos como totalmente accesible- no puede hacer olvidar lo mal que está jugando y jugó anoche en Boston, la "Roja" que adiestra Juan Antonio Pizzi. Es cierto, Chile sumó sus tres primeros puntos y es muy probable que el martes ante Panamá en Filadelfia, logre su clasificación para los cuartos de final de la Copa América Centenario. Pero respecto a lo que exhibe este equipo en cancha, se nota pobreza.
Será que están cansados o que quizás, ya tocaron techo en cuanto a sus propias posibilidades, lo cierto es que ésta selección chilena está muy por debajo de la que -con casi los mismos jugadores- logró levantar la Copa América jugada hace exactamente once meses atrás en suelo chileno.
Caído del cielo
De lo poco rescatable que tuvo Chile anoche, fue que siempre buscó ganar, algo quizás lógico para cualquier deporte, pero que ayer por ejemplo en Bolivia, no se manifestó. Y es que los pupilos de Julio César Baldivieso estaban "fascinados" con el empate, como si les sirviese de algo o los instalase en una próxima ronda. Y en búsqueda de ese objetivo, que sus jugadores hicieron todo el tiempo del mundo, cayendo al piso en forma reiterada, para pedir la camilla y todo el ritual que aquello conlleva. Fue por eso que el juez norteamericano, Jair Marrufo, agregó ocho minutos de descuento cuando el reloj marcaba los 94 de juego y justo cuando un boliviano... exigía atención médica.
En eso estaban cuando se armó la polémica. Minuto 97, centro por derecha de Alexis Sánchez y la pelota que rebota en el codo derecho del boliviano Gutiérrez. El juez no iba a sancionar nada, pero su asistente levantó su bandera y corrió rumbo a la línea de fondo. Era una señal clara y había que cobrar... pese a los reclamos bolivianos, quienes, obviamente, se sintieron despojados. El reloj marcaba así el minuto 100 de partido y Arturo Vidal selló un triunfo sufrido para una selección que pese a las aseveraciones de su técnico... no muestra signos de mejoría. Y es que sin el ánimo de incendiarlo todo, no se puede soslayar que Chile se midió ayer ante el peor equipo de Sudamérica y así y todo, nos tuvieron por las cuerdas.