Inicia la cuenta regresiva para el fin de las facturas 'a la antigua'
Desde el 1 de agosto será obligatorio que las Pymes facturen sus transacciones digitalmente.
Ya es un hecho, estamos a poco más de una semana para que desaparezcan las históricas facturas en tinta y papel, ya que desde el próximo 1 de agosto será obligatorio que los pequeños y medianos empresarios realicen sus compras de manera digital.
El proceso comenzó el año 2012 con la ley 20.727 que estableció que la antigua factura impresa debía ser reemplazada por una versión electrónica. Las primeras en cambiarse al nuevo sistema fueron las grandes empresas, quienes tuvieron que someterse al nuevo regimen, pero ahora es el turno de la pequeña y mediana empresa.
El seremi de Economía, Aland Tapia, explica que este nuevo sistema posee varias ventajas para el contribuyente. "Significa ahorro de tiempo y dinero, elimina la posibilidad de la pérdida de documentos, porque antes era muy engorroso recuperar un papel y puede permitir almacenar documentos tributarios, son varios los beneficios", sostiene Tapia.
Como funcionará
Quienes deben someterse obligatoriamente al nuevo sistema son todos los comerciantes de las zonas urbanas que facturen al año entre 2.400 U.F. ($62.667.288) y 100.000 U.F. ($2.611.137.000).
El seremi de Economía, explica que en el sitio web del Servicio de Impuestos Internos (home.sii.cl) se creó un portal especial para realizar esta operación e interiorizarse de los pasos que hay que seguir. Lo primero es verificar si el contribuyente está dentro del rango de ventas anuales, lo que se puede corroborar en el mismo sitio ingresando el RUT del titular, luego viene la inscripción para adquirir el certificado digital que es un documento electrónico fundamental para realizar esta operación. Se puede entender como una suerte de carnet de identidad virtual de cada persona, que permite realizar múltiples trámites de manera online.
Una vez que se obtiene este certificado, viene una declaración de cumplimiento y ahí se completa el traspaso al nuevo sistema. Para aquellos contribuyentes que no tengan habilidades en computación, existe la opción de acercarse a las oficinas del SII, y pedir orientación. El seremi de Eocnomía, señaló que se trata de una operación relativamente sencilla y no debería demorar muchos días, así que quienes comiencen ya este trámite podrían llegar al plazo límite. "Todavía tenemos algunos días para hacer el cambio, así que no debería haber mayores problemas para inscribirse a tiempo", indica Aland Tapia.
Una vez ingresado al nuevo sistema, los contribuyentes registrarán sus ventas sin gastar papel ni tinta sino que de forma digital, siendo el sistema más utilizado el de enviar la factura al cliente y al SII por correo electrónico.
Para gestionar este servicio, existe un sistema gratuito que ofrece el mismo SII y también hay compañías privadas que ofrecen ese servicio.
El cambio a la factura electrónica es obligatorio y quienes no cumplan el mandato se arriesgan a sanciones.