Con arresto domiciliario quedó agresor de chofer de línea 706
El adolescente imputado se entregó ayer en la Fiscalía. Al salir del tribunal, junto a unos amigos gritó "¡quedamos libres!" y se tomaron una selfie.
Con arresto domiciliciliario total durante los días que dure la investigación, quedó el menor acusado de agredir a un conductor de la línea 706, ocurrido la tarde del pasado domingo y que le provocó la pérdida de la visión de unos de sus ojos al trabajador.
El adolescente, de iniciales M.L.A., que era buscado por la policía, se entregó ayer en forma voluntaria. Junto a su padre llegó hasta la Fiscalía y durante la tarde se realizó el control de detención y formalización en el Tribunal de Garantía de Valparaíso.
Según informó la fiscal Daniela Quevedo, el menor fue formalizado por el delito de robo con violencia y el tribunal determinó 50 días de investigación. "Se solicitó como medida cautelar el arresto domiciliario total, con el objeto de que él permanezca en la ciudad del juicio y para darle protección a la víctima", destacó.
La abogada explicó que existen varias atenuantes en el caso, entre ellas que el imputado es menor de edad y que se entregó en forma voluntaria, de ahí que no se solicitara la reclusión provisoria.
Otros involucrados
Según testigos fueron dos los individuos que atacaron al conductor. "Eso fue parte de la denuncia, pero ahora sólo pasó sólo él a control de detención", señaló la fiscal.
El incidente partió cuando el chofer de la micro, Robert Henríquez de 40 años, increpó a dos jóvenes que venían molestando a los pasajeros lanzando escupitajos. Les pidio que terminaran con el escándalo, considerando además que los había llevado gratis.
Luego uno de ellos le lanzó 400 pesos a la cara y dijo "agradece que no te asaltamos". La discusión prosiguió y los amigos tomaron a Henríquez, lo bajaron de la micro y lo golpearon con elementos contundentes en la calle, lo que finalmente le provocó la pérdida de uno de sus ojos a la víctima.