Lola de 14 baleada por carabineros en carrera clandestina
En Placilla tres policías dispararon cuando choferes quisieron arrollarlos. Bufanda salvó a menor herida en la mandíbula. Familia critica reacción de uniformados.
Con un proyectil en su cara terminó ayer una liceana viñamarina, que asistió a una carrera clandestina de autos en Placilla. El disparo vino de la policía que repelió un intento de homicidio, pero la familia de la víctima desestimó esa versión y anunció acciones legales.
De acuerdo a la policía uniformada, los hechos se registraron pasada la medianoche, cuando una patrulla con cuatro funcionarios de la subcomisaría Placilla se dirigió al Parque Industrial, para detectar vehículos que regularmente los fines de semana participan de carreras clandestinas. Fue así que en la esquina de las calles Tupungato con cerro El Altar, apreciaron a una quincena de motorizados sospechosos de la actividad ilegal.
Un cabo 1° y dos carabineros descendieron del furgón para fiscalizar a los participantes, cuando los conductores se les abalanzaron a gran velocidad con clara intención de atropellarlos. Los uniformados lograron esquivarlos y desenfundaron sus armas de servicio -revólveres Taurus calibre .38- y abrieron fuego en contra de los automóviles, que lograron escapar del lugar, sin que pudieran registrase sus placas patentes.
14 tiros
El fiscal Cristián Andrade dispuso que Labocar efectuara peritajes en el lugar, constando que se ejecutaron 14 tiros. Dos funcionarios dispararon en cinco ocasiones y uno en cuatro oportunidades. No hubo carabineros lesionados. La SIP buscó imágenes de cámaras de seguridad de empresas del sector, y se remitieron los antecedentes al Ministerio Público como homicidio frustrado a carabinero de servicio.
Transcurridos unos minutos del incidente, al hospital Gustavo Fricke ingresó la menor G.C.L.M., de 14 años, quien presentaba una herida a bala en el rostro. Ella admitió que estaba de acompañante en las carreras clandestinas de Placilla, cuando fue herida por uno de los disparos. A la adolescente, domiciliada en Forestal Alto, le diagnosticaron "alojamiento de proyectil en mandíbula costado izquierdo, de carácter grave y sin riesgo vital".
Consternada estaba ayer la familia de la lesionada, que es alumna del Liceo Comercial. Su hermana gemela R.L.M., señaló que como en anteriores ocasiones, su hermana salió junto a su pololo de 18 años, y otros amigos de Forestal Alto, hasta Placilla para reunirse a los habituales "piques". Ella no los acompañó esta vez, porque reconoce ambas asisten de manera regular a estos eventos. "Eran como 8 autos y no estaban corriendo. Mi hermana estaba sentada de copiloto y estirada en el asiento. Cuando mi cuñado se subió y empezó a arrancar, los carabineros dispararon y por el costado del maletero del automóvil llegó el tiro que le dio a mi hermana en la mejilla izquierda. Ella no se dio cuenta al principio, le dolía pero nunca pensó que era una bala", indicó.
El pololo la llevó al Gustavo Fricke donde comprobaron tenía alojado un proyectil balístico. "Mi hermana siempre usa bufanda y la bala entró por allí", acota. Agrega que según la versión entregada por asistentes al hecho, no hubo un intento de los conductores por atropellar a los funcionarios policiales. "Eran pocos autos y estaban reunidos en el lugar. Nunca antes habían disparado y aunque sean ilegales las carreras ellos no pueden reaccionar así". Define a su hermana como tranquila, estudiosa y muy apasionada por los automóviles.
Mamá
Ana Marín, madre de la niña herida, dijo a La Estrella que ésta permanecerá al menos cinco días internada en el recinto asistencial viñamarino para evitar una posible infección. Estabilizada, se recupera satisfactoriamente y quedaría sin secuelas. Habla con dificultad y come alimentos blandos. Sobre lo acontecido, la progenitora criticó el procedimiento policial. "No fue así como ellos dicen que los iban a atropellar. Ellos corrieron a subirse a los autos para huir y la bala que hirió a mi hija entró por el maletero. Se supone que (los carabineros) están para proteger al ciudadano y no perjudicarlo. Haremos acciones legales para evitar que esto le ocurra a otras personas. Gracias a Dios la bufanda que ella usaba le ayudó a contener la velocidad de la bala. Si no estaría muerta", sostuvo Ana Marín que también pondrá más atención en que sus hijas no asistan nuevamente a este tipo de "piques" ilegales.