Mito griego llega con la Ópera Acteón a la USM
La magistral obra de Marc-AntoineCharpentier vuelve a ver la luz con un exitoso montaje.
Redacción - La Estrella de Valparaíso
Una historia cautivante y estremecedora musicalizada a la perfección vuelve a los escenarios para exhibirse mañana sábado (19:30 horas), en el Teatro Aula Magna de la Universidad Santa María.
Se trata de la Ópera Acteón, pastoral barroca escrita por el compositor francés Marc-Antoine Charpentier, durante el apogeo de la tragédie en musique. Un montaje pocas veces representado en Chile pero que el año pasado fue aclamado por el público y la crítica durante sus funciones en el centro cultural GAM, llevado al escenario de manera magistral por la Camerata Instrumental y Coro del Instituto de Música de la Universidad Alberto Hurtado (UAH), junto a solistas vocales, bajo la dirección escénica de Gonzalo Cuadra y conducción musical de Felipe Hidalgo.
Violaine Soublette, gestora del montaje y directora de la carrera de interpretación superior mención canto de la UAH, indica que "esta es una joya de gran calidad musical, con poca difusión en relación al nivel artístico que tiene. Su origen se sitúa en los inicios del género operístico, es una pieza bastante temprana donde todavía no está tan desarrollado el concepto de aria, son poemas recitativos que se combinan con las intervenciones del coro. Este montaje tiene la característica de reunir nuevos talentos con interpretaciones notables". En esta versión de Acteón destacan las actuaciones de los solistas vocales David Rojas, Gianina Ramos, Jade Berk, Belem Abraham, Stefanía Alegre y Andrea Manque.
LA TRAGEDIA
El argumento de esta ópera se inspira en el mito griego descrito por Ovidio en "Las metamorfosis", sobre el cazador Acteón, hijo de Aristeo y nieto de Apolo, que ha ido de cacería junto a sus amigos. Para su desgracia, la diosa Diana y su corte de ninfas y faunos han elegido el mismo lugar para su descanso, un placentero lago donde se dan un baño. Acteón, maravillado por la hermosa desnudez de la diosa no mide el peligro y Diana, sorprendiéndolo, le impone un fatal castigo; lo transforma en ciervo y deja que los propios perros del cazador lo devoren.
Gonzalo Cuadra, reconocido por su trabajo al mando de grandes producciones operáticas, comentó que "este es un montaje dentro de la academia que destaca a todas luces por su nivel musical y escénico.