Carla Olivares Rojas

Luego de pasar horas críticas y de mucha angustia, ayer Pamela Kroyer reía de buena gana. Era como si hubiese renacido luego de enterarse de que su hija, Nicole Ríos, tras pasar cinco días extraviada en Colombia, apareció con vida: algo lastimada y deshidratada, pero bien.

El martes se habían comunicado por última vez. La conexión a internet no es buena en el país cafetero, por eso que la profesora de historia le había advertido a su madre que no se preocupara si no podía comunicarse. Y así fue.

El sábado recién se enteraron de lo que estaba pasando, luego de que la dueña del hostal donde alojaba diera aviso a las autoridades de que la joven no había vuelto hacía varios días.

"Ella terminó Servicio País en San Francisco de Chiu Chiu y quería conocer Colombia, se compró sus pasajes y se iba por un mes. Estuvo en Bogotá y se fue a con la chica de Recursos Humanos a Medellín, pero como esta niña conocía los parajes, se devolvió y Nicole quedó sola. Ella le dijo a otra chica que conoció que se iba al sector de Las Cascadas y se fue sola con su cámara. Ella salió y se empezó a internar en un lugar turístico que no estaba prohibido, pero tampoco estaba señalizado. Cuando se quiso devolver se desorientó, se le hizo tarde caminando y no pudo salir", relató Pamela Kroger desde su departamento en Rodelillo, Valparaíso.

Casas de la guerrilla

Según relató la misma profesora desde el hospital a la prensa colombiana, la primera noche la pasó bajo una intensa lluvia, rogando porque ésta amainara, pero al parecer era peor. No pudo dormir nada y al amanecer continuó su camino.

Fue ahí cuando se encontró con una casa abandonada en una zona que hasta hace poco estuvo controlada por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Estuvo tres días esperando que alguien fuera por ella, pero como eso no ocurrió, con un trozo de carbón escribió en sus murallas sus datos, cómo estaba, hacia dónde se dirigía y con quién comunicarse.

"Esperé tres días aquí, como no llegaron, tomé el sendero de la izquierda siguiendo el río. Si no lo logro, avisen a Claudio Lorca (deja un número). Dejé mis cosas en el hostal Kayam de Guatapé, allí hay 400 dólares que deben ser entregados a mi mamá en Chile", escribió.

Ella salía a diario, marcaba la ruta y se devolvía a alojar en la cabaña, pero al tercer día abandonó esa casa definitivamente.

Síquica

Pamela Kroyer estaba nerviosa sin hablar con su hija, intuía que algo le había pasado. Se comunicaba con sus amigas que estaban en Colombia, pero tampoco tenían noticias de ella, y pensaban que se había ido a Cartagena de Indias, que era un destino que Nicole quería conocer. Pero todo era incierto.

Las autoridades colombianas iniciaron la búsqueda el día viernes. Al día siguiente encontraron el refugio y la noticia comenzó a salir en la prensa. Fue entonces cuando la familia se enteró de que estaba desaparecida.

"Nosotros tenemos a la niña que se tituló con Nicole, ella tiene una prima que es síquica y ella la visualizó cerca de un río, dijo que estaba bien, que estaba viva, en un clima húmedo y que estaba atrapada, pero que la íbamos a encontrar y que necesitaba la fuerza de nosotros. Según nos hemos enterado, donde ella se perdió es un clima frío, un lugar completamente distinto al que describió la síquica y que fue donde la encontraron. Algo que a todos le ha llamado la atención por lo asertiva que fue", señaló.

La noche del sábado fue la más larga para la familia de Nicole, pero la síquica les dio una esperanza de que no todo estaba perdido y con eso se quedaron con fe en que la encontrarían sana y salva.

La joven se extravió en el municipio de Guatapé, pero fue encontrada en el sector Las Cabañas del municipio de San Carlos, distante a dos horas en auto y un día a pie.

"Para mí la noche del sábado fue la más larga de mi vida, le pedía a Dios que la protegiera, que le mandara un ángel para que la cuidara. Cuando ella dejó el refugio fue a buscar ayuda porque se le acabó el sustento, en el camino se encontró con un campesino que la acompañó toda la noche, pero que tampoco dio aviso porque no había cómo comunicarse. La acompañó hasta que la rescataron, dice que la entregó a las autoridades y desapareció, no sabe su nombre ni nada, creo que fue el ángel que le pedí a Dios para ella", señaló la mamá de Nicole, quien finalmente pudo hablar con su hija el domingo alrededor de las 22.00 horas.