Priscilla Barrera Ll.
"Paola Romano Cademartori no es una sicópata". Así lo plantea su abogada particular, Fabiola Vilches quien manifestó su conformidad y satisfacción luego que el pasado 11 de julio el Tribunal Constitucional fallara a favor de su representada, escenario judicial que permitiría a la defensa de la llamada "Parricida de Recreo", incorporar una pericia sicológica que había sido excluida por el Tribunal de Garantía de Viña del Mar y que demostraría el estado mental y de vulnerabilidad en que se encontraba la mujer al momento de atentar contra su pequeño hijo de 4 años, en agosto de 2014.
La abogada detalló que precisamente la pericia sicológica, que en su momento no pudo incorporar, da cuenta de la estructura de personalidad de Paola Romano.
"En este informe pericial se sostenía claramente que ella era una mujer con un perfil de víctima de violencia intrafamiliar, muy vulnerada y claramente se establecía que no cumplía ningún parámetro de una sicopatía", aseveró Fabiola Vilches.
"violencia"
La abogada defensora añadió que el mismo informe permitiría establecer que Paola Romano no sólo habría sido víctima de violencia de parte de su ex pareja y padre de su pequeño hijo sino también, víctima de lo que ella denomina "violencia institucional".
"Ella pierde la custodia de su hijo en un contexto muy violento (...) Ella estaba clamando por ayuda y no le fue proporcionada por ningún ente del Estado, ni el tribunal de familia que no tomó los resguardos para que hubiera un equilibrio de fuerzas en en el juicio de cuidado personal, ni la Corporación de Asistencia Judicial que no se hizo cargo de este tema. Esta mujer entró sola a juicio (...) Todo este historial fue gatillante en ella y que termina desencadenando una situación tan grave como ésta", argumentó Fabiola Vilches.
Apelación
La abogada destacó que en su reciente fallo, el Tribunal Constitucional acoge la tesis de que es posible para la defensa deducir apelación cuando se le excluye una prueba por vulneración de garantía.
"El Tribunal Constitucional va más allá y sostiene la completa legalidad de las pruebas que presentan las defensas", planteó Vilches.
Lo que resta ahora es el pronunciamiento de la Corte de Apelaciones de Valparaíso respecto de la apelación. De acogerse, la defensa podría incorporar la pericia sicológica y darse inicio al juicio oral.