Carla Olivares Rojas
Setenta y nueve casos más que los ocurridos los primeros seis meses del año pasado de Hepatitis viral A se detectaron entre enero y junio de este año en la región de Valparaíso, lo que llevó a los especialistas a hablar de un "brote".
Lo anterior tras un reporte emitido por departamento de Epidemiología del ministerio de Salud que señala que a nivel nacional se notificaron un total de 1184 casos, el doble del año pasado en que hubo 590 casos.
El 70% de los casos registrados afecta al grupo etário que va de los 20 a los 39 años de edad y los hombres se han visto seis veces más afectados que las mujeres.
Valparaiso
Valparaíso es una de las regiones que más casos presentó. Entre enero y junio de este año se conocieron 87 casos, algo muy lejano a los 8 casos reportados en la misma fecha del año 2016.
Del total, un 32,2% de los hombres afectados declaró mantener relaciones homosexuales y las comunas que más enfermos presentaron son Viña del Mar con 33 casos; Valparaíso con 23 y Quilpué con 8.
"Podemos decir que estamos ante un brote epidemiológico. En Chile es habitual que estos casos se produzcan en la infancia por la ingesta de comida contaminada, pero ahora está afectado a personas adultas sin anticuerpos y el contagio se asocia a la actividad sexual", señaló el doctor Luis Bavestrello, infectólogo de la Clínica Bupa Reñaca y ex presidente de la Asociación Panamericana de Infectología (API).
El médico explicó que el contagio se propaga a través de la materia fecal e indicó que existe una vacuna disponible que consta de dos dosis que se pone cada 6 meses para asegurar una protección que se podría extender por unos 10 años.
Una vez ocurrido el contagio, los primeros síntomas ocurren entre 2 y hasta 8 semanas después y puede confundirse con una gripe dado que existe dolor corporal y fiebre inicial; en muchos casos la enfermedad pasa desapercibida. En otros casos el color amarillo de la piel y ojos acusa la enfermedad, hay deshidratación y en los casos más extremos y que representan menos del 1% se puede productir una hepatitis fulminante con la destrucción del hígado.
Antofagasta también es una ciudad con un alto índice de enfermos, pero a diferencia de Valparaíso, en esa región el contagio se asocia al consumo de alimentos en la vía pública.