Erika Rojas Salazar
En el entretiempo del duelo entre Wanderers y Unión Española se hizo, por altoparlantes, un llamado a la ambulancia para socorrer una persona desmayada en la galería norte. Los casi 10 mil hinchas presentes en el estadio supieron de la emergencia, sin embargo y tras el cero a cero, nadie imaginó que dicho hincha falleció camino al hospital.
Teodorio Mario Reyes Barrios de 71 años es el protagonista de esta historia. Wanderino de toda la vida, ese día "Latito" apenas tomó desayuno para llegar a la hora al partido del mediodía en Playa Ancha, a los que siempre asistía solo, ubicándose en la galería norte junto a Los Panzers.
"Mi papi se desvaneció y se desmayó en la mitad del partido, le dio un preinfarto, por eso la ambulancia de la Mutual lo atendió y lo trasladó hasta el Sapu de Quebrada Verde. Los doctores dijeron que estaba bien y lo dieron de alta, tras llamar a su familia", cuenta Katherine Reyes, sobrina y criada como hija de "Latito", quien agrega que unos tíos lo fueron a buscar y él solo decía que tenía mucho frío.
La familia del wanderino fallecido comenta que la doctora que lo atendió explicó que su presión arterial estaba bien y los otros signos vitales también, por eso se lo podían llevar a la casa. Pero al bajar desde Playa Ancha en el auto, con dirección al hospital Van Buren, Teodorio volvió a infartarse y murió en el trayecto.
El diagnóstico del Sapu, informado en el documento emitido al paciente, se limita a decir que sufrió de lipotimia, es decir un desmayo.
Negligencia médica
Juan Carlos Reyes, sobrino del porteño y quien lo fue a buscar a Quebrada Verde, señaló que como familia se querellarán por negligencia médica en contra de la profesional que atendió a su tío en el centro de salud primario, pues se le dio de alta, pese a que habría sufrido un preinfarto, además de pedir una revisión del protocolo de la ambulancia del estadio, que lo derivó al Sapu y no al Hospital Carlos Van Buren.
"Nadie busca compensación económica, pues no nos devolverán a nuestro tío, sin embargo queremos algún castigo para los responsables que no advirtieron la gravedad del diagnóstico de mi tío. Es que si a lo mejor lo hubieran llevado de inmediato al hospital, no habría pasado esto", sostiene Juan Carlos Reyes, quien iniciará los trámites legales el próximo lunes.
En su casa insisten que "Latito" no era enfermo crónico ni tampoco sabía que padecía problemas coronarios, por eso la situación les duele más.
Primo de Chichí
Amante del fútbol en general, el ex jugador del Helénico de Barón y fundador de su propio club infantil llamado "Lato", Teodorio siempre se preocupó de fomentar el deporte en su barrio y ayudar a los niños del barrio y de hogares.
"Latito" contaba con la ayuda de su primo Raúl "Chichi" Aravena, actual técnico de las series inferiores de Wanderers, quien en varias ocasiones le regaló algunos implementos del club de sus amores.