Fabián San Martín D.
Que se aclaren las circunstancias en que su ser querido resultó herido de gravedad, pide la familia de un joven baleado esta semana en Valparaíso.
De acuerdo a la versión policial entregada a este diario, cerca de las 17.15 horas personal de la Octava Comisaría Florida patrullaba por la parte alta del cerro Alegre, cuando en la calle Pezoa Véliz divisaron a un sospechoso al que pretendieron efectuarle un control de identidad.
El sujeto escapó hacia la población Joaquín Edwards Bello donde se refugió en una casa abandonada. En este lugar -señala la policía uniformada- el muchacho apuntó con un arma de fuego a un efectivo que lo perseguía, quien utilizó su arma de servicio y le disparó en el hombro. El lesionado, que portaba marihuana elaborada, fue llevado al hospital Van Buren. Carabineros señaló que el joven, de 22 años, huyó porque registraba tres ordenes de aprehensión vigentes por hurto y robo por sorpresa en tribunales de Viña del Mar y Valparaíso. Posee amplio prontuario delictual.
Pariente
Como Ángel Sarao fue identificado el lesionado en el operativo. Su madre, Valeska Sarao, junto a su amiga Claudia Vallejo, se acercaron a La Estrella a cuestionar el procedimiento policial.
Primero reconocieron que el veinteañero, producto de su adicción a las drogas había delinquido, y que existían las órdenes de arresto porque no se presentó a las audiencias en los juzgados, quebrantando así beneficios otorgados por la justicia. Agregan que portaba una tobillera electrónica la que había desactivado.
Respecto del día de los hechos, las mujeres indicaron que Ángel se hallaba en casa de una tía que le pidió fuera a comprar una bebida. "La verdad le tiene terror a los controles de identidad porque no quiere irse preso a la cárcel", sostienen para explicar su decisión de huir apenas vio a la patrulla de Carabineros. Su versión difiere de la oficial, ya que aseguran que consiguieron testigos que señalan el joven se ocultó en una vivienda, pero en ningún momento extrajo un arma de fuego para amenazar a un funcionario. "Estamos seguras que el nunca ha portado pistola ni cuchillos. No entendemos porque los carabineros actuaron así".
Lo cierto es que el proyectil que ingresó por el hombro terminó afectando la zona del esófago del paciente, el que tras ser operado se encuentra internado en la UCI del hospital porteño. "Está con riesgo vital nos dijeron los médicos", dicen sus cercanas, que acudieron a la Fiscalía y la defensoría penal. Esperan que el caso sea investigado y se sancione a los responsables del baleo. "Queremos justicia. Así como le pasó a Ángel le puede pasar a cualquiera. No es un gran delincuente para que hayan actuado así con él".