De ejecutiva de banco a repostera anti gluten
Su intolerancia a esta proteína le causó una crisis de salud. Decidió dejar su antiguo trabajo y dedicarse a cocinar productos que tampoco tienen azúcar ni lactosa.
Claudio Morales S. - La Estrella Quillota - Petorca
Con su profesión de ingeniera comercial, Jhoana Leiva Vergara gozaba de estabilidad laboral como funcionaria bancaria. Sin embargo, tuvo problemas de salud y descubrió, hace ocho años, que era celíaca.
Esta quillotana decidió transformar esa crisis en una oportunidad y dar un giro a su vida. "Por un tema personal, de salud, porque soy intolerante al gluten, es que decidí hacer un cambio de switch, salir de los bancos y realizar este emprendimiento al cual le estoy poniendo todas las ganas, con productos para personas con intolerancias alimentarias, adaptando también esta repostería para diabéticos y gente que no consume lactosa y hasta huevos", explica Leiva.
Los clientes se han ido sumando y Jhoana ya cuenta con compradores fieles, pese a que partió con este negocio en julio. Ella cree que cada día tendrá más demanda ya que "la alimentación que tenemos a disposición está llena de preservantes y eso estropea nuestro organismo, ya no comemos como antes, en que no existían este tipo de intolerancias, o bien, no eran estudiadas. Siempre le echaban la culpa al colon o a cualquier otra cosa".
La salud importa
Jhoana Leiva quiso sanar su propio organismo cambiando su alimentación, pero también con sus preparaciones quiere ayudar a las personas que tienen las mismas necesidades.
"Yo he estudiado sobre eeste tipo de alimentación, voy a seminarios en Santiago. Con la salud no se juega, yo no puedo hacer preparaciones con productos que sí tengan gluten, porque el cliente se me va a enfermar. El tema de la manipulación y la contaminación cruzada es muy importante", enfatiza esta nueva repostera, quien creía que llevaba una vida normal antes de su cambio, "no le daba importancia a señales que me daba el cuerpo, hasta que tuve una crisis estomacal severa y me descubrieron que tenía el intestino perforado. Y era por consumir gluten".
Difícil y caro
Pero realizar este tipo de preparaciones no es ni sencillo ni económico, ya que el gluten por ejemplo, cumple una labor singular en las masas, según explica esta emprendedora.
"Es una proteína presente en el trigo, y que se utiliza para espesar los alimentos, además hace que las masas sean elásticas, por eso es mucho más fácil amasar un producto que tiene gluten que uno que no lo contiene. Es como tratar de amasar arena. Es súper complicado, a mí me ha costado harto, pero he ido aprendiendo", dice Jhoana.
Otro punto es lo oneroso que sale preparar estos productos para sobrellevar la intolerancia alimentaria, como ha comprobado esta ex funcionaria bancaria.
"Hacer esto es extremadamente caro. Considere que un kilo de harina que me traen del sur me sale 5 mil pesos, comparado con los mil que cuesta la harina normal. A mí, 250 gramos de tagatosa (un endulzante), me sale 5 mil pesos, mientras el kilo de azúcar está como a 700 pesos", ejemplifica Jhoana Leiva, quien en todo caso considera "que cada vez más la gente está tomando conciencia de que se trata de tu cuerpo, de tu salud, de tu vida" y por lo mismo clientes no le faltan.