Robots explorarán el fondo del mar
Fueron presentados en Valparaíso y se pretende que se sumerjan por sobre los 10 mil metros.
Isabella Gálvez Olivo - La Estrella de Valparaíso
Abordo del buque Cabo de Hornos en el Puerto de Valparaíso, el Instituto Milenio de Oceanografía (IMO), dio a conocer la exploración marina que se llevará a cabo en la Fosa de Atacama durante los últimos días de enero hasta principios de febrero.
El proyecto contará con una tecnología similar a la usada por James Cameron, director de Titanic, en el 2012 en su exploración de la fosa de las Marinas, el punto más hondo del mar.
Este proyecto, respaldado por la iniciativa científica Milenio y apoyado por la Armada de Chile, tiene como objetivo "estudiar el océano profundo y ultra profundo del Pacífico Sur, incluyendo la Fosa de Atacama". Busca, también, probar la hipótesis que, basada en algunos estudios, afirma que el lugar más profundo del planeta no es la fosa de las Marinas explorada por Cameron, sino la de Atacama.
Los encargados
A diferencia de Cameron que exploró en persona el mar, esta vez bajarán robots no tripulados, llamados "landers", acoplados por ingenieros norteamericanos que colaboran con el equipo chileno. Todos sus componentes y tecnología debe ser de punta, para sobrevivir a la fuerte presión de las profundidades más extremas.
El capitán de fragata, Claudio Muñoz, explicó que se trata de una oportunidad única en el país que busca apoyar el desarrollo científico nacional. "Llegaremos a una zona acotada, entre el norte de Coquimbo y Caldera. En complemento con IMO, podremos mapear el fondo marino entre los 2.000 y 10.000 metros para poder desplegar un robot de caída libre que podrá llegar hasta los 10.000 metros", dijo el comandante.
Añadió que esperan arribar a la zona de estudio el 27 de enero y pasar un par de días, dedicados a la investigación, sobre los puntos más profundos, para concluir el proyecto el 2 de febrero.
Por otro lado, Virginia Garretón, bioquímica y directora ejecutiva de Milenio, se refirió a los descubrimientos científicos que esperan encontrar durante la exploración. "Los seres vivos hasta los 500 metros, más o menos, son los que nosotros siempre hemos conocido. Cuando bajas de ahí y empiezas a irte más profundo necesitas generar estructuras biológicas que aguanten presiones que no son normales. Hasta los 2.000 o 3.000 metros podemos encontrar esos peces de luz que aparecen en 'Buscando a Nemo'. Pero lo que hay bajo esa profundidad, ni siquiera lo podemos imaginar", señaló Garretón. También habló sobre los riesgos tecnológicos y técnicos que pueden d arse en el camino, como el daño de alguno de los "landers" o el aumento de la presión bajo el agua que afecte los censores de los submarinos autónomos.
Los profesionales del IMO evaluaron la expedición como un "salto tremendo" que le regala a los científicos locales una oportunidad única y enriquecedora. Se prevé que a mediados de febrero se presentarán los resultados de la expedición marina y se llegarán a conclusiones.