El feminismo actual parece haber olvidado a algunas de sus más importantes precursoras como Olympe de Gouges, asesinada por los paladines de la fraternidad revolucionaria, los jacobinos, por el simple hecho de redactar los derechos universales de la mujer y exigir la igualdad ante la ley que se proclamaba desde los púlpitos y asambleas.
Bajo claros sesgos ideológicos, las actuales promotoras del feminismo y los derechos de la mujer también parecen olvidar a las mujeres sometidas bajo el comunismo como, por ejemplo, la abogada y jurista checa Milada Horáková. Quien fuera miembro de la resistencia contra la ocupación nazi, fue ejecutada por el régimen comunista checo un 27 de junio de 1950. ¿Cuál era el delito de la también diputada de la Asamblea Nacional y fundadora del periódico femenino Vlasta? Oponerse al golpe de estado hecho por los comunistas y la posterior persecución política, iniciada por éstos en 1948, en contra de cualquier disidente del nuevo régimen comunista en Checoslovaquia.
En el Día Internacional de la Mujer sería bueno que el feminismo contemporáneo también recuerde a estas mujeres.
Jorge Gómez Arismendi