Hemos presenciado el totalitarismo de la Universidad Arturo Prat, el odio insertado en las mentes débiles y el nivel al que pueden llegar las nuevas generaciones por una cuestión ideológica.

Ni el ex presidenciable, ni nadie merece ese tipo de violencia por pensar distinto, estamos siendo testigos de cómo los sectores políticos de izquierda han instrumentalizado los cuerpos intermedios, testigos de cómo insertan el odio a las nuevas generaciones y miedo a quienes llegan a pensar diferente.

Lo ocurrido con José Antonio Kast es una realidad que le pasa a muchas personas, conozco casos de jóvenes que no quieren ingresar a las universidades estatales para evitar exponerse a este tipo de violencia e intolerancia en vez de entrar en diálogo y respeto mutuo. Estamos hablando de jóvenes que no ingresan a las universidades que les gusta para evitar violencia ideológica, ¿es correcto llegar a este tipo de reacciones?, pues, yo creo que no.

Esto es para que reflexionemos y evitemos llegar a este tipo de

actos violentos y cobardes.

Violencia

La semana pasada vimos la violencia sufrida por José Antonio, el maltrato a un inmigrante, un horrible homicidio y hoy, nuevamente, debo condenar la violencia, no para sacar provecho político como dicen algunos, o para jugar al empate como creen otros.

La violencia se condena siempre, venga de donde venga, afecte a quien afecte.

Chile está herido por la violencia, es nuestro deber de ciudadanos curar esa herida, hago un llamado a no normalizar la violencia, denunciémosla para que Chile crezca.

Hago notar que no solo en Chile existe violencia, pero nuestro primer deber es para con la patria, por ahí se parte.

Soy un convencido de que podemos ganar esta lucha, pero necesitamos unidad y compromiso.

A la derecha, el centro, la izquierda y los apolíticos los invito a jugársela por un país libre de violencia.

María Fernández González Silva

Vicente Bruna, presidente Crea Uandes.