37 internos de Valpo y su nueva vida por un título universitario
En el gimnasio del Complejo Penitenciario porteño se efectuó la ceremonia de inauguración del Año Académico Universitario de la UPLA. Se trata de la II generación.
En la parte alta de Valparaíso, allí donde por esta fecha la niebla matinal se cuela y permanece anclada a los huesos de sus residentes (algunos permanentes; otros pasajeros), se tejen historias de superación al calor de sueños… entre rejas.
Al interior de ese perímetro amurallado en longitud, lo que hasta hace un tiempo sonaba a quimera, hoy comienza a consolidarse a la realidad: un grupo de personas privadas de libertad del Complejo Penitenciario de Valparaíso están dispuestos a ganarle al destino. A eso que expertos al tema sostienen que la falta de formación y el fracaso escolar están directamente ligados con la delincuencia y la cárcel.
Que 37 reclusos estén estudiando la carrera de Técnico en Administración Logística al interior de la unidad, impartida por la Universidad de Playa Ancha (UPLA), a través de su instituto profesional, desde el año 2017, es la prueba viviente que se puede.
Otra chance
Los cimientos al proyecto tienen como protagonista a Rigoberto Mandiola, quien ya cursa el segundo año de la carrera técnica. Las posibilidades de una nueva oportunidad le han generado a Rigoberto nuevas metas. En sus palabras: "Pasé primer año y ahora segundo año se viene un poquito más complicado, pero se puede. Sí se puede, y aprobamos todo esto, se van a presentar otros proyectos. Me gustaría seguir avanzando con esto. Esto no es fácil, es algo que cuesta, pero igual se puede".
Así, con la finalidad de incentivar a personas como Rigoberto para que estudien en pos de un mejor futuro y, de paso, demostrarles el compromiso con este proceso educativo, tanto Gendarmería como la casa de estudios playanchina realizaron inauguración del año académico.
Ceremonia efectuada hace unos días en el gimnasio del establecimiento penitenciario y que contó con la presencia de autoridades de ambas instituciones, además de la seremi de Justicia, Amaia Arraztoa, director regional de Gendarmería, coronel Eduardo Muñoz Bravo, y familiares de los alumnos.
Segunda generación
Alejandro Arévalo, subdirector técnico de Gendarmería, manifestó que: "El esfuerzo que está haciendo la Universidad de Playa Ancha, instalando la carrera de técnico en administración logística en el Complejo, nos demuestra que éstos si pueden dar resultados. Estamos en la segunda generación de estudiantes y creemos que tenemos que seguir trabajando y esforzándonos para la reinserción social de los privados de libertad".
Cita de Arévalo que tuvo eco en el rector de la Universidad de Playa Ancha, Patricio Sanhueza Vivanco. Y su respaldo al tema: "Estamos contentos de estar aquí junto a una segunda promoción de estudiantes en esta carrera donde del primer grupo, que ingresó el año pasado, 17 personas siguieron sus estudios regularmente".
A criterio de Sanhueza se ha tratado de una actividad muy exitosa, "el hecho que le hayamos dado esta esperanza ha provocado también que ellos hayan cambiado y sean mucho más seguros de sí mismos y de su propio futuro. Si la universidad puede ayudar a ese cambio, a ese progreso, al desarrollo de estas personas, obviamente que está cumpliendo su misión, visión e impronta".
Ignacio Marciel va en primer año. Pese a que recién lleva poco más de un mes estudiando, tiene un convencimiento: "Aquí uno no viene a perder el tiempo, solo hay que estudiar y ponerle empeño, nada más".
Pero como Manu Chao, aquel artista clandestino de Mano Negra que cantaba 'si la vida me da palos yo la voy a soportar', reconoce errores y se esmera por salir adelante. "He arruinado mucho mi vida como para seguir arruinándola. Esta es una oportunidad que no voy a desperdiciar", dice convencido en un futuro mejor.
Por su parte, Amaia Arraztoa, seremi de Justicia, se mostró expectante y optimista: "Satisfecha y con harto entusiasmo de que estos jóvenes y adultos puedan dar inicio a esta carrera y con ello abrir una puerta, una ventana, a una nueva vida, y lo que tanto queremos: la ansiada reinserción social".
A saber: Ignacio y los restantes estudiantes se deben trasladar de lunes a viernes hasta las salas de clases ubicadas en el multitaller. Allí permanecen de 16:00 a 19:00 horas adquiriendo los conocimientos que les permiten ver la vida... esa con la esperanza de que se convertirán en profesionales y podrán insertarse en la sociedad.