Asaltante simuló voz de la hija de mujer plagiada
Alejandro González Pérez y su hermano Juan Michea Pérez, fueron formalizados por robo calificado. Quedaron en prisión preventiva.
Como autores del delito de robo calificado fueron formalizados ayer los hermanos Alejandro González Pérez de 27 años y Juan Michea Pérez de 34, quienes mediante engaño telefónico y simulando el secuestro de una de sus hijas, obligaron a una anciana de 80 años residente en la comuna de Vitacura a girar todo el dinero de su cuenta bancaria, ascendente a casi 5 millones de pesos en una sucursal del Banco de Chile de Viña del Mar.
Los dos detenidos fueron trasladados desde la Primera Comisaría de Carabineros de Viña del Mar hasta el Tribunal de Garantía de esta ciudad.
En la sala 2, los imputados, domiciliados en la comuna de Peñalolén, quedaron en prisión preventiva, luego que el magistrado Rodolfo Moreno, accediera a la solicitud de la fiscal, Paola Rojas. En el mismo acto, y a solicitud tanto de la defensa como del Ministerio Público, el juez declaró la incompetencia del tribunal para continuar con esta causa, solicitando el traslado al tribunal competente en la Región Metropolitana, dado que el principio de ejecución del delito - donde se inició - fue en la zona Oriente de la capital.
Llamados
Durante la audiencia de formalización, la fiscal Paola Rojas, detalló que el imputado González Pérez, declaró ante la fiscal Vivian Quiñones que la idea del delito fue de él y de su hermano y que él mismo simuló voz de mujer para engañar a la anciana y hacerle creer que era su hija y que estaba secuestrada.
De acuerdo con el detalle dado a conocer en la audiencia de formalización, la víctima, M.A.R.A. de 80 años recibió tres llamados telefónicos a partir de las 3 AM del jueves 17 de mayo: el primero, supuestamente de su hija, en el que la mujer le comunicaba que estaba secuestrada y que la tenían en Américo Vespucio con Apoquindo. En el mismo llamado, la supuesta hija le pedía a su madre que llevara sus joyas y que los secuestradores la esperarían en un supermercado del sector.
Sin tiempo a pensar, y poniéndose únicamente una bata, la anciana tomó un reloj de oro, un anillo de oro con brillantes y zafiros y una pulsera y una cadena de oro.
Cuando ya había abordado su automóvil particular, la anciana recibió un segundo llamado, donde le indicaban que debía entregar sus joyas a dos sujetos. En el lugar de encuentro, la mujer es abordada por los dos sujetos - los imputados - quienes le quitan las joyas y su celular, la obligan a trasladarse al asiento del copiloto y la trasladan hasta Irarrázabal donde habrían dejado las especies.
Aquí es cuando recibe un tercer llamado, nuevamente de su supuesta hija, quien le advierte que no haga nada, "no los denuncies porque me tienen amenazada".
Luego de un giro de 200 mil pesos en un cajero automático, los sujetos junto a la víctima, se trasladan a Viña del Mar, donde se dirigen a la sucursal del Banco de Chile de calle Valparaíso donde se concreta el giro de casi 5 millones de pesos y donde por fortuna, la mujer logra pedir ayuda, concretándose la detención de los antisociales por parte del OS9 de Carabineros.
Simuló voz
Dado que se hablaba de una voz de mujer que simuló ser la hija de la víctima, se creía que existía una tercera persona involucrada, sin embargo, uno de los imputados - González Pérez -, renunciando, previo a la audiencia de ayer, a su derecho de guardar silencio, declaró que la idea de este robo fue de él y su hermano y que fue él quien simuló voz de mujer haciéndole creer que era su hija.