Brutal apuñalamiento en un refugio animal le costó la vida a una perrita
Animalistas hicieron todo lo posible para salvarla, pero las heridas eran demasiado profundas.
Totalmente consternados están los cuidadores de un hogar de animales, ubicado en Placilla, tras descubrir que una de sus residentes más antiguas fue víctima de un desalmado y despiadado ataque.
Se trata del canil de Paula "Lobita" González, conocida animalista de la zona, donde una perrita fue agredida brutalmente con un arma blanca.
Paula cuenta que la información la recibió de parte de una compañera. "A eso de las 18.30 horas, llegó a la guardería como todas las tardes después de colación. Al entrar a la guardería se encontró con esta 'ancianita' de 15 años, al verla quedo en shock y empezó a gritar ya que lo veían sus ojos, no lo podía creer", cuenta.
Según el relato de la dueña del canil, la cuidadora la llamó de emergencia para informarle lo sucedido, cuando llegó al lugar, revisaron al animal, para notar que estaba ensangrentada, y lucía diversos cortes, de los que emanaba sangre.
"La perrita tenía diversos cortes en su cabeza, muslos y cortes en el cuello", añade.
Pese a los esfuerzos, la perrita de 15 años, llamada "Chiquita", perdió la vida, cuando los profesionales del hospital clínico de Lago Peñuelas trataban de estabilizarla.
En el recinto veterinario, confirmaron que las heridas fueron cometidas por terceros con un elemento cortopunzante.
La animalista porteña enfatizó en el dolor que sienten con este asesinato de una perrita que llegó en los primeros días del hogar animal, la califica como "fundadora del canil".
Asimismo, "Lobita" González señaló que interpusieron denuncia en Carabineros, pero no pudieron por falta de pruebas.
"Toda la maldad que le hicieron a esta perrita se pagará ,vine a Carabineros a poner denuncia, pero no se puede denunciar sin prueba contundente, no tenemos una persona a quién acusar. Con el equipo del canil estamos muy afectados con lo que nos está pasando, pero como 'Lobita' juro que encontraré al culpable", sentenció la porteña con rabia.