El fin de semana salí a cenar con mi familia al centro de Viña del Mar. Nos estacionamos en calle 4 Poniente para ir a comer algo al sector de la avenida San Martín; éramos dos adultos y tres niños.
La cena estuvo impecable, pero lamentablemente todo se empañó con un desagradable incidente vivido en donde estaba estacionado mi automóvil.
resulta que al parecer dicho sector es terreno de "cuidadores" ilegales, que de seguridad no entregan nada. Lo digo con conocimiento de causa, ya que cuando íbamos a abordar el vehículo para volver a nuestro hogar a eso de las 23.00 horas, dos de estos mal llamados cuidadores se vieron enfrascados en una tensa pelea. Primero fueron los insultos y después se pasó a las agresiones; finalizado todo con amenazas con cuchillos y palos en mano.
Mis hijos se pusieron a llorar y debidos encerrarnos en el auto esperando que no nos pasara nada.
El tema de la inseguridad en el centro de Viña ya no es nuevo. Se les ha permitido a estos delincuentes apoderarse de las calles no sólo para cobrar el "cuidado" de los autos por las noches, sino que también para traficar droga y delinquir.
Lo más penoso de toda esta situación es que la Primera Comisaría de Viña del Mar está a pocas cuadras de donde estos tipos se tienen tomadas las calles. Pero ¿usted cree que se ve alguna patrulla o pareja de carabineros haciendo alguna ronda preventiva en el lugar? No.
Las calles ponientes y orientes del centro de Viña son tierra de nadie.
Alberto Pérez