Matías Valenzuela

Las bondad de la miel de abeja suman un nuevo beneficio: la limpieza de oídos.

Un tratamiento que podría asociarse a la época de nuestros abuelos, es ofrecido hace aproximadamente un mes en una céntrica barbería porteña.

Se llama "Velado de oídos", y el hombre detrás de la idea nos cuenta en qué consiste, y cómo llegó a ella.

Desde su esquina en Mapu Barber Shop, Francisco León, de 23 años, cuenta como fue que un viaje a Europa encendió su ampolleta para idear el "velado de oídos".

"Esto nace con la necesidad de empezar a ofrecer nuevas experiencias, y nuevos servicios a los clientes, y principalmente, esta técnica no se hace mucho en barbería. De hecho, somos los primeros en implementarla acá. Yo viajé hace un tiempo atrás a Inglaterra, para hacer un curso, y dentro de otros servicios que ofrecen otros lugares como de centros de masajes, estaba esta técnica", cuenta.

Usa sombrero y una frondosa barba, el barbero es oriundo de Quilpué, y explica que la técnica es muy reciente y poco conocida, de hecho él mismo tuvo que indagar en distintas técnicas y productos para perfeccionarse y elaborar un servicio, uno que se ofrece desde hace un mes en la barbería donde trabaja hace un año y medio, por $10.000.

"Lo que quería hacer, era empezar a estudiar, buscar videos, investigar los productos para que no sean nocivos para salud, que ayude a mejorar ciertas cosas, y encargué los productos. Con el producto en mano empecé a elaborar un protocolo de atención eso lo diseñé yo, para que fuera lo más elegante y relajante posible, lo más prolijo, que sea como una barbería clásica, de alta gama", ilustra.

¿en qué consiste?

El procedimiento se asemeja a la técnica ancestral de las abuelas para sacar el aire de los oídos.

El cliente debe recostar su cabeza, para introducir con mucha delicadeza un cono de papel de algodón al que se le unta un poco de cera de abeja. A continuación se prende fuego al cucurucho, en la parte alejada de la oreja, con mucho cuidado.

La combustión hace lo suyo. El humo absorbe las propiedades antisépticas de la miel de abeja y por efectos de mera física, va saliendo la suciedad.

En las palabras del artífice de esta técnica, "el humo entra, como es de cera de abeja, saca cualquier resto de agua o suciedad que te puede haber quedado por, por ejemplo, bañarse en el mar o la piscina; eso lo va a sacar, te va limpiando bacterias y lo que haya. El calor obliga a nivelar la presión que hay dentro y fuera del oído, eso ayuda para la tinnitus, que es la bulla constante que se siente en el oído, la otitis y la rinitis".

Para completar la experiencia, agregan un servicio de masajes que acentúa la sensación de despeje.

"Le agregamos también un masaje facial, con una máquina especial que ayuda a mejorar la experiencia. Es en la cara y los hombros", afirma.

Resultados

Al someterse a cualquier método de limpieza de oídos, suele sorprender la cantidad de suciedad que sale, y esta no es la excepción.

Al abrir los conos de papel, después de hacer el velado, se puede ver cómo el cerumen queda impregnado. La sensación de la oreja también es distinta: empiezas a escuchar en estéreo, mucho más fuerte de lo que uno recuerda.

"Es mucho lo que se saca, a los clientes yo siempre les muestro como estaba antes el papel, y como sale, para que vean que todo lo que queda viene de ellos, no lo pongo yo. Tú te das cuenta de eso cuando te pones audífonos, cuando te lo colocas y escuchas, entiendes por qué el celular te dice que no les subas más el volumen, no es necesario ponerlo a máxima potencia", explica.

Sobre la respuesta de los clientes, Francisco dice que ha sido muy buena.

Al tratarse de un servicio nuevo, todos sus clientes son debutantes, es primera vez que se someten a este servicio, y varios de ellos han agendado una segunda sesión para el mes siguiente.

"La respuesta ha sido bastante buena. Cuando empecé, me comenzaron a hablar barberos de Santiago que quieren conocer la técnica, de hecho vamos a hacer un Workshop para enseñar la técnica a otros barberos", manifiesta.