Camila Bravo Orellana - La Estrella de Valparaíso

La necesidad de expandir los pulmones verdes de la región, aprovechar de mejor forma el agua y fomentar el crecimiento de vegetación nativa, han sido algunas de las razones para impulsar el proyecto Parque Las Aguas, la nueva expansión del Jardín Botánico Nacional (JBN).

Esta iniciativa fue planteada en 2014 por la alianza entre la empresa Bosques del Norte y la administración del JBN, sin embargo se necesitó del apoyo de entes privados.

Por ello, un millón de dólares fue la suma que lograron recaudar para financiar el proyecto, a través de la compañía Coca Cola, quien dentro de sus acciones de Responsabilidad Social, decidió devolverle a la Tierra toda el agua que ha sido ocupada por su producción a lo largo del tiempo.

"Somos los que buscaron los fondos para concretar esto. Fuimos a una reunión con Coca Cola y le planteamos la idea de hacer forestación y obras de conservación de suelo. Ellos a su vez, tenían la necesidad de financiar este proyecto por un tema de recuperación de agua a nivel mundial", señaló Oscar Sotomayor, socio de Bosques del Norte.

Ejecución

El lote C, o patio trasero del Botánico, como se le conocía, fue víctima de un incendio en marzo del 2018 y además, solía ser el espacio donde la gente iba a dejar restos de vehículos. Sin embargo hoy se convirtió en una nueva y significativa propuesta.

Esta zona será unida al parque original a través de una acceso que comienza en la laguna del recinto y que guiará al público por un sendero bordeado por un estero. A su vez, tendrá otra entrada independiente donde se cobrará tarifa de ingreso.

Este proyecto está a meses de finalizar su primera etapa, para luego convertirse en una zona de recreación abierta para el público a mediados de este año.

Hasta el día de hoy se han habilitado senderos para trekking, bicicletas y espacios de picnic; la plantación de 20 mil especies nativas y lo más importante: la excavación de 20 mil metros de zanjas que permiten capturar de mejor forma el agua.

Luego, hasta el 2035, se procederá a la mantención constante del parque.

Infiltración

Uno de los principales propósitos de esta iniciativa es infiltrar el agua proveniente de las lluvias para darle un mejor uso sobre la tierra y absorberla dentro de las napas subterráneas del terreno.

De esta manera se recuperan los pozos profundos en desuso y se aprovecha a cabalidad los recursos para nutrir a la forestación existente y la que ha sido incorporada.

"En vez de que el agua baje por la superficie, cae por estas zanjas de infiltración y se estaciona. La idea es que el agua vaya más lento hacia el mar, porque en este país hay mucha pendiente y por eso el agua se nos va rápidamente, entonces lo que necesitamos es que ésta vaya más lento para que infiltre y se cargue en las cuencas", explicó Alejandro Peirano, director del Jardín Botánico.

Cabe destacar que desde el 2014 -inicio del trabajo- hasta la actualidad, se han activado diversas vertientes que antes estaban secas y aisladas de humedad.

"Mi meta es que lo vengan a conocer los pequeños agricultores, el Gobierno Regional y que todos logren replicarlo, porque ha tenido excelentes resultados", enfatizó Peirano.

Supervisión

Según la condición del suelo, entre una zanja y otra debe haber cierta distancia, pues pueden existir riesgos. En el caso de tener muchas cuencas llenas de agua y cerca entre sí, se puede provocar un escurrimiento superficial o una avalancha de tierra.

Por ello, dentro de la planificación del proyecto se trabajó junto a un ingeniero hidráulico que hizo los cálculos necesarios para diseñar los20 mil metros de excavación de forma óptima.

Al igual que en lo mencionado, durante el desarrollo del parque se han hecho reiteradas inspecciones por agentes designados de Coca Cola, los que envían periódicamente el estado de los procedimientos hacia Estados Unidos.

"Exíste una dura evaluación porque hay un organismo argentino que nos está fiscalizando permanentemente y ellos reportan la información en Atlanta. Esto no es al azar, sino que es super objetivo y concreto", agregó el director del parque.

Daño por fuego

El incendio que acechó al lote C durante el 2018, afectó a 38 hectáreas de la zona junto a toda su vegetación. Para que estos territorios sean reforestados, el tiempo estimado que pueden tardar las especies en volver a crecer puede alcanzar los 150 años. No obstante, con la ejecución de esta iniciativa, en sólo cinco años, se ha vuelto a recuperar la vegetación completa de este lugar.