La víctima y el imputado mantuvieron una relación durante una década, de la cual nació la pequeña de 8 años. Hace dos meses estaban separados y en el control de detención, el Ministerio Público reveló que Raúl González tenía una causa vigente por amenazas, en el contexto de violencia intrafamiliar.
Son las 11.30 horas del viernes. Mientras el mundo conmemora una nueva versión del Día Internacional de la Mujer, en el Juzgado de Letras y Garantía de Quintero comienza el control de detención de Raúl González Pardo (60), imputado de matar con un disparo en la cabeza a su exconviviente Carolina Muñoz Rebolledo (42), en las cercanías del Colegio Inglés. Antes de llegar al tribunal, el sujeto dijo a los medios apostados en las afueras de la Cuarta Comisaría de Concón (donde estaba detenido) una frase que podría calificarse de ridícula e indignante: "La maté por casualidad".
Ya en el Tribunal de Quintero el juez Felipe Contreras le pide al Ministerio Público que relate los hechos y la fiscal Lidia Aspe abre la carpeta de investigación. A través del relato de testigos, sets fotográficos y el minuto a minuto de las cámaras de seguridad del colegio, cuenta cómo ocurrió el sangriento crimen. "Escucho unos disparos y cuando me acerco, veo que había una persona de sexo masculino afuera del colegio, de pelo blanco, con una pistola en su mano derecha (...) la mujer estaba en el suelo y la pateaba... quedé en shock", dice uno de los testimonios. Los familiares, que tratan de contener el llanto, se ponen de pie, y gritan: "¡Maldito, te odio, viejo de mierda! ¡Mataste a mi hermana! ¡Mataste a la mamá de tu hija, traficante cul...!". El magistrado les pide que guarden silencio, pero en vez de callar, optan por salir. Les acompaña Valentina Stagno, la seremi de la Mujer y Equidad de Género (Sernameg).
La fiscal vuelve a tomar la palabra y ahora cuenta lo que grabaron las cámaras de televigilancia del Colegio Inglés. Ésta es la dinámica de los hechos:
-19.03.00 horas. Se observa cuando la víctima ingresa al colegio y toma contacto con su hija en una especie de antejardín.
-19.06.00 horas. Se aprecia cuando el imputado llega a bordo de su vehículo y se estaciona frente al colegio. En ese momento, la madre y su hija salen.
-19.08.36 horas. El imputado se encuentra con la madre y la hija, aprovechando que la puerta (del colegio) estaba aún abierta. El imputado toma contacto de frente con la víctima, quien se encuentra acompañada de su hija. La saca hacia la vía pública, tal como indicaron los testigos.
-19.08.57 horas. El imputado aborda a la víctima desde sus vestimentas con la mano izquierda y con la derecha la amenaza con un arma de fuego. En la siguiente imagen se ve al imputado amenazando a la víctima con el arma de fuego, mientras su hija intenta detener la agresión. Los niños, apoderados y profesores que están cerca huyen hacia el interior del colegio.
-19.09.15 horas. El imputado dispara a la mujer mientras la sostiene de las vestimentas y se aprecia pólvora en suspensión producto del proceso del disparo.
-19.09.18 horas. Se observa el momento cuando el imputado tras haber herido mortalmente a la víctima, le propina un primer golpe en la cabeza con el arma.
-19.09.25 horas. Segundo golpe en la cabeza con el arma.
-19.09.26 horas. Tercer golpe en la cabeza con el arma.
-19.09.32 horas. Primer golpe de pie.
-19.09.41 horas. Cuarto golpe con el arma en la cabeza. El imputado bota el arma.
Tras el relato de la fiscal, el magistrado Felipe Contreras le da la oportunidad a la defensa. Ésta, en pocas palabras, advierte que es una "persona con irreprochable conducta anterior", y que este dato es relevante, ya que se trata de un adulto mayor y no un joven. Además, que entregó el arma y no se movió del sitio del suceso. "Solicito arresto total domiciliario", cierra. La fiscal Lidia Aspe enfatiza que en el crimen hubo alevosía y que se tiene que declarar la prisión preventiva. "El imputado es un evidente peligro para la seguridad de la sociedad", afirma. La justicia determina que estará en prisión durante los 120 días de investigación, por los delitos de femicidio y disparo injustificado de arma de fuego. Afuera, la gente se manifiesta con impotencia: "¡Para Carolina no había nadie, para el asesino los pacos en la calle!".
Al cierre de esta edición se supo del arresto por robo del cuñado de la occisa, que con dos sujetos entró a la casa del femicida Raúl Gonzalez para sustraer ropa de adulto, celulares y vale vista de bancos extranjeros. Supuestamente fue a buscar ropa para la niña que está ahora bajo su tutela y la de su esposa, pero salió con otras cosas de valor.
"Que esto le pueda ocurrir a una mujer hoy día en el mundo, en Chile, en nuestra región, en Quintero, es algo inaceptable (...) Una persona con dos balazos delante de su hija, herida de muerte y después de eso siendo golpeada con el arma y a patadas en la calle, esto no tiene nombre. Hoy se ha dado un primer paso con la formalización y con la prisión preventiva, pero no vamos a quedar tranquilos hasta que tengamos la máxima pena para este delincuente... para este imputado que tiene otras calificaciones peores. Esperamos cadena perpetua", dijo el intendente de Valparaíso, Jorge Martínez, quien presentó una querella junto a Sernameg contra el imputado.