En calle Uruguay ningún negocio se salva de los robos
Desde hace un año que la cuadra entre Van Buren y Hontaneda sufre por los delincuentes.
Más de 8 locales, ubicados en pleno sector El Almendral, por calle Uruguay, en la cuadra que va entre Carlos Van Buren y Hontaneda, han sufrido hurtos y asaltos hasta a mano armada el último año.
Desde el invierno pasado que los delincuentes no le han dado respiro a los locatarios y el último gran hurto fue el de la Ferreteria Oróstica y Péndola,el pasado 7 de abril, donde se llevaron 30 millones de pesos en maquinaria y dinero en efectivo. Duilio Péndola, uno de los socios del local, indicó que los ladrones ingresaron por el techo y los sistemas de seguridad no funcionaron.
"El día que entraron los ladrones, la empresa de seguridad Verisure se enteró por nosotros mismos del robo y después vinieron a cambiarme todo el sistema y hacer peritajes. De todas formas ya no es lo mismo, uno queda mal después de esto. Es que es toda una vida de esfuerzo, llevamos 21 años y 15 años acá en calle Uruguay. Veníamos bien aspectados del verano, pero el robo echó a perder todo", explica Péndola, quien ahora tiene problemas para dormir y no quiere alojar lejos de la región para estar alerta a su negocio.
Asalto a mano armada
Más arriba de la Ferretería, su vecina de la librería y Claudio del minimarket (Uruguay 872) ya habían pasado por lo mismo. El año pasado a la librería le cortaron la cortina y lo más grave fue el 19 de diciembre, cuando 3 desconocidos entraron al minimarket Uruguay y a mano armada se llevaron un notebook y 600 mil pesos.
"Ese día nos quedamos hasta más tarde, pero no tanto, hasta como las 19.00 horas y justo nos asaltaron. Fue terrible, pero es difícil recordar facciones o datos de los asaltantes, pues llegaron con pasamontañas y las cámaras no sirvieron de nada", indicó Claudio, dueño del minimarket, quien señaló que ahora cierran a las 18.00 horas, pues el sector "muere" tras esa hora, al no existir público que circule en la arteria.
Uno a uno
Además de los tres locales mencionados, Soldaduras Toto, un taller automotriz y uno de pinturas, por nombrar algunos, han sido parte de la ruta de los delincuentes. En la mayoría de los casos el ingreso de los desconocidos ha sido por el techo.