Micro se pasó un 'lomo de toro' y joven por poco queda postrada
Quilpueína denuncia que sufrió graves lesiones. Seremi de Transportes investiga el hecho.
"No sentí las piernas. Me subí sana a la micro y prácticamente me bajé inválida, en una silla de ruedas". El martes 30 de abril, a las 12.30 horas, Sigrid Medina de 18 años junto a su madre, fueron al centro de Quilpué para realizar unos trámites bancarios. Cuando se desocuparon, decidieron volver a casa en una micro del recorrido 119, de la empresa Fenur. "Siempre la tomamos porque nos deja justo en la esquina. Mi mamá se sentó en los primeros asientos, y yo en los últimos, porque iba más o menos llena", explica la joven.
Sin embargo, apenas la micro avanzó unas cuadras, madre e hija se arrepintieron de haberse subido. El chofer iba a exceso de velocidad y prácticamente no respetaba las señales del tránsito. Tanto así, que cuando llegó a la calle Atacama, en el sector de Pompeya Sur, se pasó un resalto simple, más conocido como "lomo de toro", y siguió el trayecto como si nada hubiera pasado. "Con el impacto casi topé el techo y me caí de golpe. El chofer iba tan fuerte, que llegué a sentir el fierro del asiento. De inmediato sentí un dolor indescriptible, que las piernas no me respondían y que no podía hablar", afirma Sigrid Medina.
No hizo nada
A gritos, unos pasajeros le pidieron al chofer que disminuyera la velocidad, pero no les hizo caso. Paralelamente, una mujer que iba sentada en los puestos delanteros, se percató de que Sigrid Medina no iba bien. "Con las manos le pedí ayuda y se acercó a preguntarme si venía con alguien. Como pude le indiqué que andaba con mi mamá, la señora de pelo rojo", comenta la afectada.
Los pasajeros volvieron a increpar al chofer de la máquina, esta vez rogándole que se detuviera en el consultorio de Pompeya. "No quería hacerlo y gritaba: '¡Qué tanto, que haga efectivo el seguro del boleto!'. No le importaba lo que me pasaba. Al final me dejó en el consultorio y los mismos pasajeros se consiguieron una silla de ruedas para trasladarme. Yo sentía mucho miedo porque no podía caminar, me dolía mucho la espalda y sólo pensaba que iba a quedar inválida", manifiesta Sigrid Medina.
Dada la gravedad de las lesiones, la joven fue derivada del consultorio Pompeya al Hospital de Quilpué y de ahí al Hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar. "El chofer siguió su recorrido como si nada y yo, por su imprudencia al volante, quedé con una contusión lumbar - dorsal y una fractura del coxis sacro. Hice la denuncia en Carabineros para que estos choferes no anden más en las calles, porque aunque algún día podré volver caminar, ahora estoy en cama, con mis estudios estancados y sin siquiera poder ir al baño sola", se lamenta la quilpueína.
Seremi
El seremi de Transportes, Gerard Oliger, repudió el hecho y aseguró que tomará medidas. "Vamos a hablar internamente con Carabineros para proceder a la investigación y hacer las formulaciones respectivas, para ver la unidad que corresponde y aplicar los procedimientos administrativos que están vigentes", informó.
Además, la autoridad reiteró que ante estas situaciones, los usuarios pueden denunciar en el sitio web www.transportescucha.cl.