Después de ver jugar a Claudio Bravo en el arco del Manchester City en un amistoso en contra del West Ham de Pellegrini, tras 11 meses sin jugar y luego al leer los destacados comentarios de los expertos, por su excelente perfomance, en la que volvió a mostrar su destreza con los pies, dos tapadas, de esas que nos tenía acostumbrados y además la especialidad de la casa, casi ataja un penal, no cabe ninguna duda de que Bravo, nuestro Gran capitán, estaba absolutamente preparado y en una forma física excepcional para haber custodiado el arco de la roja en la pasada Copa América, pero eso es pasado...
Raya para la suma, no hay que reinventar la rueda, todo indica que con Bravo en el arco en Brasil, otro Chile hubiera cantado, definitivamente es otro Chile, ya no hay más excusas, si ó si, debe volver para las eliminatorias a Qatar, tal vez un café colombiano, muy bien cargado y amargo del camarín en pleno sea la solución, para que Claudio Bravo retome el arco de la Roja, justo ahora que nuestra Generación Dorada entra en la tierra derecha de su exitosa vida deportiva...
Diálogo fructífero
Primó el entendimiento, el mérito y la racionalidad. Nadie duda del mérito de la jueza María Angélica Repetto, quien posee credenciales suficientes para formar parte de la Corte Suprema, aunque su nominación pendió de un hilo. Pero con un diálogo fructífero logró destrabarse.
Lo más interesante es el nuevo método que propuso el ministro Hernán Larraín para futuras designaciones, eliminando el cuoteo y la "conversación de pasillo". De ahora en adelante se discutirá abiertamente entre el Senado y el ministro, promoviendo un diálogo entre ambos poderes del Estado.
Ese es el actuar que debe seguir el país, dejando de lado los berrinches personales y priorizando la institucionalidad republicana.
Luis Enrique Soler Milla
José Luis Trevia