Informan que el beso está en retirada. La situación es espantosa. El drástico fenómeno ocurre, fundamentalmente, entre las parejas estables. El beso, la antigua maniobra labial para expresar atracción y descontrol romántico, se realiza cada vez con menos frecuencia.

Y, en cambio, en lo que atañe a parejas lesbianas, el beso está en su apogeo. Las lesbianas dan un crédito muy importante al tradicional beso, la sexualidad de ellas comienza en un intercambio contundente de lenguas. Es cosa de mirar películas pornográficas. En ellas, por lo general, si hay una escena lésbica, se fundará en besos audaces.

Respecto a los homosexuales, también hay una frecuencia alta en los besos. Los hombres, entre sí, no titubean. El beso es una artimaña sólida para adquirir una conducta fogosa. Es, según los sexólogos de todo el mundo, el paso crucial al orgasmo. Le llaman algunos "el primer aventón".

Llevando todo esto a estadísticas, las cifras marcan con claridad el auge y la caída del beso.

Por ejemplo, una pareja de lesbianas, una pareja de esta orientación que inicia el camino al placer, parte besándose con pasión. Con sutileza y pasión. Suaves besos femeninos, carentes de brusquedad, las hace disparar humo. Los números delatan esta afición: el 95% de las parejas lesbianas se besan durante el acto sexual.

A su vez, un 71% de los homosexuales se besan durante el coito.

Y, en último lugar, pero a una enorme distancia de los besadores que lo preceden, las parejas heterosexuales sólo se besan en un 25% al realizar proezas sexuales.

Los expertos han hecho pública su preocupación. El beso es el hito de la sexualidad romántica. El beso es una de las bases notorias de la excitación. Y ya lo han anunciado: una pareja que se besa, siempre es una pareja feliz.

Si bien el beso no pasa por un buen momento en la sexualidad de una pareja heterosexual, el Kamasutra establece que hay 22 tipos de besos. Todos ellos muy ardientes. Por ejemplo está el beso con pestañas, el beso con dos o tres dedos, el beso que recorre toda la cara. En fin. El beso no ha muerto.

22 besos