Luego de jugados -el pasado fin de semana- seis de los siete pleitos correspondientes a la 18a fecha del Torneo de Apertura en la Primera B, el panorama era claro para San Luis, que anoche cerraba la fecha visitando a Naval en el CAP.

Con una victoria, el cuadro Canario se coronaba campeón... así de simple. Un empate y por cierto una derrota, postergaba en al menos una semana más, la definición del campeonato.

Con aquel claro panorama -pero también, con el peso de la responsabilidad- arribó el cuadro amarillo hasta la VIII Región. Al frente, los pupilos de Mario Lepe (ex jugador símbolo de la UC) no querían festejos en sus narices. Y su confianza se sustentaba en tres triunfos seguidos y nada de fáciles, en las últimas jornadas: 2-1 en Coquimbo, 1-0 a Santiago Morning en El Morro y 2-1 a Curicó Unido en La Granja. Además, los choreros sabían que de vencer a San Luis, las distancias con el líder se acortarían a 9 unidades (27 contra 36), trepando los del Ancla hasta el 4° lugar en la tabla de posiciones.

ASEFF, LA FIGURA

ASEFF, LA FIGURA

Sin llegar a desplegar el fútbol que lo tiene en lo más alto de la tabla de posiciones, San Luis fue por grandes pasajes, el dominador del partido.

Llegadas muy claras, no hubo. Pero cuando la defensa local sucumbió, apareció la figura del golero Luis Aseff, quien evitó en varias oportunidades el grito del gol en los canarios.

Y como siempre se dice en el fútbol... gol perdido, gol recibido. Y así ocurrió en el minuto 66", instante en que el joven goleador de Wanderers -a préstamo en Naval de Talcahuano- Ronnie Fernández, definiese con clase y de pierna derecha un buen centro lanzado desde la izquierda por el lateral Umaña.

Aquel único tanto sentenció la lucha y con ello, San Luis no pudo celebrar el título... pero sigue con la primera opción ya que con dos fechas por delante (seis unidades en disputa), el Canario aventaja por cuatro a Barnechea, su rival del próximo sábado en Quillota.