Moisés Villarroel: "Esperaré que se me pase la pena y veré qué haré"
El "15" de Wanderers no quiso profundizar ayer en su dolor.
Hace un par de días Moisés Villarroel confesaba que quería seguir jugando, pero nadie de la dirigencia se había acercado a conversar con él. Rumores en la prensa escrita indicaban que el sentir de la dirigencia y del cuerpo técnico era ofrecerle un cargo en las series cadetes, o tal vez en la comisión fútbol; por eso el capitán llamó de inmediato a sus "jefes" para saber de primera fuente tales rumores. A Villarroel se le negó tal información y el juves asistió junto a su hijo Cristóbal a la presentación de la nueva camiseta.
En la sede de calle Independencia, el capitán se sentó en la testera junto a dirigentes y auspiciadores y su pequeño hijo modeló la indumentaria.
Camino a plaza Victoria, donde se premió a algunos hinchas, Villarroel confesó que se sentía intranquilo, pero confiaba en que todo estaría bien. El lunes el panorama cambió radicalmente para el forestalino. Por la mañana se le informó de su sobre azul y durante el día trató de digerir la noticia.
PENA y MÁS PENA
PENA y MÁS PENA
Ayer temprano el tema reventó. Pero el jugador no se quedó en casa. Si bien su teléfono sonaba apagado, Villita estuvo con los niños del Centro Abierto del sector El Tranque de Forestal y sin querer profundizar en su despido; el capitán sólo explicó entre líneas que "espero que se me pase la pena y después veré que haré", se disculpó Villarroel.
El jugador de 37 años, que no se maneja mucho en redes sociales, se ha enterado del apoyo que le han dado los hinchas y agradeció a todos; pero insistió que quiere descansar.
Con casi 20 años de carrera y con sólo 3 camisetas en su trayectoria: Selección Chilena, Colo Colo y Wanderers, sin contar el Olímpico de Forestal a nivel amateur; Moisés Villarroel siempre se identificó con la verde caturra y su objetivo era retirarse en Wanderers, club donde se formó.
Este año Villarroel inauguró su escuela de fútbol en el Italo Composto de Villa Alemana. Este es otro punto a analizar por el jugador, que mañana se reunirá nuevamente con los dirigentes.
FACTOR BASAY
FACTOR BASAY
Como en todas las historias siempre surgen rumores respecto a motivos extrafutbolísticos que incidieron en un final como este. Fuentes al interior del plantel indicaron que la figura de Moisés Villarroel habría opacado al DT Ivo Basay. El capitán, era uno de los pocos que sacaban la voz dentro del camarín y era respetado como líder, en tanto Basay contaba con la autoridad, pero no con el carisma que lo hiciera cercano a sus dirigidos.
Con Jorge Ormeño los dirigentes aún no han conversado sobre su renovación. El jugador se encuentra de vacaciones y según fuentes cercanas, el 8 caturro esperará hasta la próxima semana para resolver su situación. Ormeño estaría tan descontento con la forma en que se despidió a Villarroel que habría pensado en solidarizar con él y quizás retrasar su recontratación. Sobre los refuerzos, además del "talentoso" Lucas Wilchez, llegaría a Wanderers el "conocidísimo" volante Leonardo Valencia, ex Palestino.
Ormeño y valencia