Desilusionados se fueron ladrones que trataron de dar un gran golpe en un local porteño. El robo quedó ayer al descubierto en el negocio Manuel Escartini y Compañía Limitada, ubicado en avenida Pedro Montt N° 2857. Junto con vender elementos de mecánica, el lugar funciona además como casa de cambios de moneda.

El fin de semana, desconocidos escalaron por la parte trasera que conecta con un terminal de buses hasta el segundo nivel del inmueble. Ingresaron por una ventana y, una vez adentro, registraron las dependencias, pero se fueron directamente hasta donde se encontraba la caja fuerte, cuya puerta forzaron.

Pensaron que adentro habría una fuerte suma de dinero; no obstante, se encontraron con un magro botín de 50 mil pesos y una pistola calibre 9 milímetros, inscrita legalmente por el propietario. Escaparon por el mismo lugar donde ingresaron.

Al procedimiento acudieron carabineros de la Segunda Comisaría Central y, por instrucción del fiscal de turno, José Miguel Subiabre, peritos del Laboratorio de Carabineros (Labocar), los que buscaron evidencias que permitan identificar y ubicar a los integrantes de la banda delictual.

Un triste final tuvo el paseo de un grupo de menores viñamarinos en un fundo de Placilla, luego de que uno de ellos perdiera la vida ahogado.

Según datos recabados por La Estrella, los hechos acontecieron la tarde del domingo, cuando cuatro adolescentes de entre 13 y 15 años ingresaron por la parte posterior -un acceso no habilitado- al fundo Las Cenizas de Placilla, de 2.200 hectáreas de extensión.

Los menores portaban una caña de pescar y caminaron por cerca de una hora al interior del fundo, hasta que llegaron al denominado Tranque Colectivo, el cual se encuentra contaminado y no es apto para el baño.

desapareció

Eran las 17.30 horas y, aparte de tratar de pescar, los muchachos, sin supervisión de un adulto, decidieron refrescarse. Dos de ellos se internaron sin mayores problemas en el tranque y un tercero, identificado como L.A.A.C., de 15 años, decidió seguir a sus amigos, pero no sabía nadar muy bien, por lo que de pronto desapareció en medio del agua.

Desesperados, sus compañeros llamaron a Carabineros y acudieron efectivos de la subcomisaría Placilla. Momentos después lo hizo personal especializado del Gope. Los buzos de la policía uniformada en menos de 15 minutos rescataron el cadáver. Por instrucción del fiscal de turno, el cuerpo fue periciado por el Lacrim y la Brigada de Homicidios de la PDI.

Los detectives descartaron la intervención de terceros y establecieron como causa del deceso una asfixia por sumersión. El occiso fue derivado hasta el Servicio Médico Legal para el examen de autopsia, para posteriormente ser entregado a sus familiares, que residen en la avenida La Paz, de Forestal Alto.

A comienzos de año, una tragedia similar ocurrió en el tranque La Luz de Curauma. Allí tres adolescentes se internaron en las aguas, pero uno de ellos, identificado como C.A.V.N., de 15 años, no alcanzó el borde y desapareció. La Armada y el Gope lo rastrearon hasta que fue ubicado a ocho metros de profundidad. La Brigada de Homicidios estableció que falleció por una asfixia por sumersión. En el tranque La Luz hay señaléticas que indican que no es apto para el baño y la pesca.

Otro menor de 15 ahogado