En el Hospital Clínico de Viña del Mar se encuentra internado Franco Silva, un joven santiaguino de 21 años que, durante la madrugada del pasado 23 de enero, fue brutalmente atropellado en la intersección de las calles Agua Santa con Álvares, en Viña del Mar.

Los hechos ocurrieron cuando el joven, quien se encontraba de vacaciones en la casa de su hermana, intentó cruzar en la intersección antes mencionada en dirección a Valparaíso. En el lugar, un automóvil pasó a más de cien kilómetros por hora y prácticamente le destrozó el lado izquierdo de su cuerpo.

"Con unos amigos llegamos al semáforo y esperamos que nos diera la luz verde. Yo crucé y no me doy cuenta cuando ya tengo a este tipo encima. Atiné a girar un poco hacia la derecha porque si no, me mata", señala Franco, quien ya lleva más de dos semanas hospitalizado.

"Tuve una fractura de húmero en el brazo izquierdo y de tibia y peroné en la pierna izquierda. El tipo no frenó y salió arrancando, mientras toda la gente que estaba en el lugar trataba de ayudarme. Yo sólo quería mantener mis ojos cerrados porque sabía que la cosa estaba fea", relata.

El sujeto que atropelló a Franco, identificado con las iniciales P.L.A., de 27 años, se dio a la fuga, pero fue alcanzado pocos metros más allá del incidente por un micrero, quien le hizo una encerrona y terminó por entregarlo a Carabineros.

Al momento de atropellar a Franco Silva, el conductor se encontraba bajo los efectos del alcohol, no respetó la luz roja, abandonó a la víctima en el lugar de los hechos y no poseía licencia de conducir, ni tampoco los documentos del auto.

"El tipo fue muy indolente con Franco. Él llegó al Fricke a constatar lesiones justo cuando estaban atendido a Franco y yo le dije "mira lo que hiciste; mira lo que le hiciste a mi hermano", a lo que él respondió "y a mí qué me importa, no es mi problema", cuenta la hermana de Franco, Francesca Silva, quien antes que ocurrieran los dramáticos hechos se encontraba dando alojamiento a su hermano.

"Nosotros queremos que se haga justicia, porque no es posible que un sujeto que casi mata a otra persona, que estaba con trago en el cuerpo, quede libre a las doce del día siguiente, sin nada más que hacer. Nos parece una falta de respeto y por lo mismo próximamente iniciaremos acciones legales en contra de este sujeto", señala Francesca.

Además de las fracturas en el brazo y la pierna izquierda, Franco también sufrió la necrosis de la piel que se encuentra detrás de la pierna afectada. Por lo mismo, tuvieron que someterlo a una operación para injertarle piel en su extremidad. Franco, quien era fanático del fútbol y jugaba con sus amigos todos los fines de semana, tendrá una recuperación que por lo bajo tomará ocho meses. "Recién a los ocho meses comenzaré a apoyar el pie; esto da para largo y recién llevo dos semanas", dice Franco Silva.

Dura rehabilitación