La memoria es capaz de editar los recuerdos
Un estudio afirma que la mente cambia y suma elementos cada vez que rememora.
El clásico recuerdo de los enamorados cuando vieron a su media naranja por primera vez, suele ser perfecto y casi está rodeado de flores y música. Pero esta remembranza no sería fiel a la realidad.
Un estudio de la Escuela Feinberg de Medicina, de la Universidad Northwestern, EE.UU., reveló que la mente puede modificar los recuerdos según el sentir actual de la persona con respecto a alguien o a una situación en particular. Es más, las evocaciones pueden mutar cada vez que la memoria las visita. En palabras de Donna Jo Bridge, coautora de la investigación, "no es que uno pueda volver atrás y ver lo ocurrido tal como pasó, sino que la memoria reconstituye y edita". Con estos antecedentes, el otro autor del estudio, Joel Voss, agregó que "la noción de una memoria perfecta es un mito".
Desde la psiquiatría
El psiquiatra y docente de la Universidad de Chile, Luis Alvarado, afirmó que efectivamente "no existe el recuerdo de lo pasado, a lo que accedemos es a una interpretación del pasado y, en ese sentido, recordar es una reconstrucción significativa y, por supuesto, moldeable". A esto sumó que los recuerdos "son siempre una reconstrucción y la verdad histórica, de existir, sería inaccesible". Además, dijo, "la reconstrucción que llamamos recuerdo se va empobreciendo porque los contenidos y afectos disponibles para ello, han disminuido en calidad".
Con respecto a cuál sería la función de este proceso mental, el especialista sostuvo que ésta puede ser "permitir que los procesos de memoria funcionen sin mayor interferencia. También es necesario recordar que "pensamiento y emoción, memoria y afecto y memoria y acción son conceptos que suelen funcionar en yunta", dijo. Por ejemplo, el aprendizaje adquirido a través de palabras es diferente al que se obtiene a través de la práctica.
¿Cuánto puede cambiar?
Para Alvarado no hay límites a la hora de cambiar un recuerdo. "Lo puedes modificar muchísimo, suprimir, reforzarlo o condicionarlo", contó. "De hecho, modificar un recuerdo es facilitar su reconstrucción de un modo significativamente diferente. Así funcionaría en parte la psicoterapia", afirmó.