Llegó con cartel de ganadora y respondió, y vaya que lo hizo con creces. Abanderada de Chile para los Juegos Olímpicos del año 2004 y constante animadora de campeonatos mundiales y eventos sudamericanos en la natación, Kristell Köbrich llegó a la región con la responsabilidad de sumar una nueva medalla de oro para su país, y lo respondió como corresponde.

Esta vez, la sirena competía en los 10 kilómetros de natación en aguas abiertas, carrera que no es su especialidad y de la que tuvo que retirarse en las pasadas Olimpiadas debido a fatiga muscular. Sin decepcionar y apabullando a sus competidoras, Köbrich quedó en primer lugar de su serie con un tiempo de una 1 hora, 58 minutos y seis segundos.

La chilena, dueña de innumerables récords tanto a nivel nacional como sudamericano, se llevó su segunda presea dorada en estos Odesur, luego de haber conseguido el primer lugar en 1.500 metros en piscina.

Apelando a su gran fondo físico, Kristel ganó con propiedad la carrera y apenas salió de la laguna rápidamente comenzó a saludar al ferviente grupo de espectadores que vibraron y gritaron cada vez que se anunciaba que Köbrich pasaba en primer lugar las respectivas boyas.

"Mira a la gente, estamos en otra región y vinieron a apoyar igual. Esto es una maratón, hay que mamársela dos horas estando ahí. Fue súper duro, había que ir con la mentalidad de darlo todo o nada, sé muy bien que es difícil para las demás aguantar mi ritmo, pero uno nunca sabe hasta llegar a la meta. En la última vuelta se te viene todo el cansancio encima, pero se bien que estoy entrenada y preparada para poder aguantar este ritmo de competencia", dijo la sirena. Tras la nacional, llegó la argentina Cecilia Biagioli con un tiempo de 2 horas y 15 segundos y luego, la brasilera Ana Da Cunha con 2 horas y 4 minutos.

La fans número 1

La fans número 1

Sin lugar a dudas, Kristel tiene una seguidora más fiel que ningún otro deportista, su hermana. Kathe Köbrich la acompaña a cuanta competición puede y, además, lo hace con una camiseta de Chile con el apellido que ambas comparten. Una vez finalizada la competencia que le dio el oro a Kristel, la nadadora se encerró en un cálido abrazo con su hermana, quien en las tribunas VIP de la laguna, la esperaba emocionada.

"Es muy difícil poder explicar lo que es ver a tu hermana compitiendo y ganando de esta forma, sobretodo aquí, nadando en Chile con todo el público apoyándola. De verdad es muy emocionante", comentó Kathe.

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"Yo y la familia somos sus fans número uno, siempre la hemos apoyado en todo lo que ha decidido hacer, la apoyamos cuando decidió irse a entrenar a Córdoba (Argentina) y alejarse de la familia hace ya once años. Me imagino que su vida no es fácil, viajar, levantarse a las 3 y media de la mañana a entrenar cuando nosotros a veces recién venimos llegando de alguna salida. Es duro, pero yo sé que mi hermana es fuerte y está preparada para todo", sostuvo. j

Vicente Vidal también llevó los colores patrios en los 10 kilómetros en aguas abiertas. Pese a empezar muy bien y ocupar, por momentos, el segundo lugar, este fue cedido a nadadores más experimentados que dejaron a Vicente con una meritoria novena posición.

El oriundo de Olmué, se mostró feliz por sus resultados, proyectando como será su carrera en el futuro: "Lo importante era aguantar el ritmo y demostrar que uno está compitiendo. Ahora hay que seguir mejorando y en un futuro poder estar en el grupo los de más adelante". señaló tras la carrera.

Vicente, más local que nadie, remarcó lo importante del apoyo en Curauma: "Mi familia y gente que no me conoce me apoyaron mucho, cada grito le daba fuerza a mis brazos", dijo.