Algo más tranquila, pero no por eso menos ajetreada estuvo la segunda jornada de paro de Metro Valparaíso que se extiende desde el martes y de forma indefinida.
Aunque los flujos estuvieron algo mejor, un choque en el sector de El Olivar generó un taco de proporciones entre Quilpué y Viña del Mar, lo que generó la molestia de lo automovilistas y pasajeros.
'Estos días hemos transportado a más gente, lo que ha sido un beneficio enorme para nuestros asociados y el plan de contingencia del gobierno ha funcionado bien porque no ha habido grandes aglomeraciones de público, los problemas han sido menos de los que se creía', señaló Oscar Cantero, dirigente microbusero.
Según el conductor, el gremio ha logrado absorber entre el 60 y el 70% de los pasajeros que se transportan en metro a diario y que se han estimado en unas 70 mil personas.
'No se ha hecho un conteo, pero creemos que nosotros tenemos entre un 60 y un 70% de los pasajeros del metro. El resto se ha movilizado en sus vehículos hacia sus lugares de trabajo y eso se ha notado en la calle, porque al no haber restricción para la locomoción colectiva y más automóviles en las calles, el flujo es más lento, pero ha sido fluido', recalcó Cantero.
José Miguel Piñones es acomodador de autos en la estación de Villa Alemana y en los 14 años que lleva ahí asegura que jamás había ocurrido nada parecido a lo de hoy.
En el lugar, el flujo de vehículos ha bajado ostensiblemente, lo que significa una merma para los trabajadores, pese a que de igual forma tienen algo de clientes. 'Los autos que hay son los de clientes que se ponen de acuerdo con otros y se van juntos en un solo vehículo. Nosotros les avisamos del paro, pero no falta los que andan perdidos y vienen a tomar el tren', señaló. J