El sábado en la tarde, Karina Cerda le dijo a su madre Nitza Núñez que se iba a juntar con una amiga en Viña y que a más tardar, estaría a las 19.00 horas en su casa. Sin embargo, eso no pasó y desde entonces, la adolescente de 15 años permaneció con su celular apagado.

Nitza apenas se percató, le preguntó a su esposo si se había comunicado con su hija y él, relajado, le contó que la había llamado y que le había contestado Hazaret Henríquez, un lolo santiaguino de 14 años que Karina conoció por Facebook.

Preocupada, la mujer dio aviso a Carabineros. 'Hazaret le dijo a mi esposo que los dos estaban bien y que andaban comprando unas cosas. Pero después de las siete ninguno de los dos contestó sus celulares. Luego me comuniqué con el papá de Hazaret que me comentó que ayer (sábado) había venido con él y con su otro hijo pequeño a pasear a Viña. Con Hazaret habían quedado de acuerdo de juntarse a las 23.00 horas en el terminal, pero no llegó. Y ya con estos datos, fui a Carabineros y a la PDI a poner una denuncia por presunta desgracia', explicó Nitza, angustiada.

Al día siguiente, Nitza junto a su esposo fueron en búsqueda de la joven, manteniendo el contacto con los padres de Hazaret, los cuales decidieron viajar a Viña. Hasta que... una llamada alertó a Nitza. 'Mamá, soy Karina y estoy en la casa. Estoy con Hazaret y estamos bien', dijo la joven por celular. J