Dos semanas movilizados cumplen hoy los médicos de la Unidad de Emergencia Adulto del hospital Carlos Van Buren y el conflicto, lejos de solucionarse, se agrava a pasos agigantados.

Por la falta de camas, insumos y otras carencias, los galenos decidieron atender sólo a pacientes C1 y C2, los más graves y con riesgo vital. Las otras patologías menores son derivadas a los consultorios.

El Servicio de Salud ofreció aumento de camillas en salas del hospital Doctor Eduardo Pereira y capacitación a los especialistas, mientras que el 23 de julio la dirección del Van Buren cumplió con una de las exigencias, como era la llegada de un nuevo jefe de la UEA. En este caso se designó en forma interina al doctor Juan Patricio Castro Gallardo.

Pero ayer las partes en conflicto se reunieron en asamblea, donde los médicos leyeron una declaración y después se retiraron, sin dialogar con autoridades como el director del SSVSA, doctor Ramón García, y otros directivos. Querían a autoridades del Ministerio de Salud.

'Declaramos a las autoridades locales, como el director del SSVSA y a la seremi de Salud, interlocutores no válidos, por lo que solicitaremos una reunión en el Minsal en Santiago', expresó la vocera del movimiento, doctora Sandra Castillo, quien afirmó que sus demandas no han sido tomadas en serio por las autoridades locales. Señaló que siguen los pacientes hospitalizados en camillas, boxes de atención y sillas.

'Los cirujanos no tienen ecotomógrafos, no hay materiales de sutura, desfibriladores... No son una realidad las 40 camas ofrecidas en el hospital Eduardo Pereira, no hay médicos especialistas, existen turnos sin médicos y sobrecarga laboral', detalló.

Además están disconformes con la designación del nuevo jefe interino de la posta, doctor Juan Castro. 'Lo declaramos como persona non grata por que ha sido investigado por el Colegio Médico, tras ser denunciado por uno de nuestros colegas por maltrato verbal. A él no lo aceptamos', recalcó la profesional.

El Servicio de Salud declinó pronunciarse respecto de esta postura de los médicos de la posta adulto del Van Buren. J

l Daños millonarios y diez damnificados provocó ayer un incendio que afectó a un antiguo edificio del Barrio Almendral. La emergencia ocurrió pasadas las 03.00 de la madrugada en un inmueble ubicado entre los números 751 y 773 de avenida Uruguay. El fuego apareció en el primer piso, donde dormían Juana Arancibia y su hija de 18 años. 'El humo nos despertó y sólo atinamos a salir rápidamente. Yo era la bodeguera, cuidaba los carros con las mercaderías de los ambulantes', dijo.

Las llamas destruyeron las mercancías de los comerciantes y luego ascendieron hasta el segundo piso, donde había una pensión. Varios adultos fueron evacuados. Una de ellas, identificada como Leonor Gómez Ugarte, de 54 años, resultó con una falla respiratoria, y se mantiene estable en la UCI del Van Buren. Otra persona también quedó lastimada.

Bomberos de siete compañías controlaron la emergencia a las 04.54 horas. La Fiscalía dispuso que el DPI de Bomberos y el Laboratorio de Carabineros (Labocar) efectuaran pericias.

El subteniente Alberto Muñoz dijo que todo apunta a un cortocircuito en una bodega ubicada en el primer nivel.