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Un viaje a Rapa Nui con sombras y marionetas

fotos de gabriel contreras

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Teatro de sombras, animación, marionetas y música en vivo crean el ambiente ideal para que un niño porteño viaje a Rapa Nui y se reencuentre con sus raíces, esas de las que tantas veces ha renegado porque sus amigos le hacen bullying. Pero al llegar a la isla descubre un mundo maravilloso que lo cambiará para siempre.

Esa es la historia que cruza la obra de teatro familiar 'Hetu'u, en el ombligo del mundo', que la Compañía Teatro Planetario estrenará este fin de semana en la sala Aldo Francia de Viña del Mar con funciones gratuitas.

Nicolás Cancino, actor y dramaturgo de la obra, contó que 'varios integrantes de la compañía estuvieron en Rapa Nui y llegaron con todo este imaginario, colores e historias y con muchas ganas de hacer un montaje a raíz de esa experiencia'.

Del trabajo conjunto nació la historia de este niño de Valparaíso, descendiente de Rapa Nui. 'Él reniega de esa herencia porque le hacen mucho bullying en el colegio por su apellido y por su nombre. En vacaciones va a Isla de Pascua, muy enojado, pero allá vive una aventura increíble, donde se reencuentra con su origen. Él la acepta y retorna a Valparaíso como una persona renovada'.

El montaje mezcla diversos lenguajes y nuevas técnicas, como sonido 3D y el uso de focos de iluminación que se encienden desde el interior de marionetas y objetos. Además, cuenta con composición de música original, que es interpretada por los propios actores.

Pero esas no son las únicas novedades en el montaje, ya que la compañía Planetario, más especializada en el teatro de sombras, incluyó marionetas en esta apuesta, ganadora del Fondart Regional 2014.

Según explicó Nicolás Cancino, 'ahora quisimos experimentar con marionetas, aunque seguimos trabajando con las sombras y con dispositivos lumínicos y escenográficos. Ha sido un trabajo complejo, pero al mismo tiempo muy enriquecedor porque logramos mezclar estas técnicas y ahora son capaces de dialogar en el escenario'.

Así las sombras se utilizan para dar una atmósfera especial a la escena, mientras que los elementos más tradicionales de esta técnica se relacionan con las marionetas.

'Hetu'u, en el ombligo del mundo' se presentará en diversos escenarios de Valparaíso y Viña del Mar durante todo agosto, siempre con funciones de entrada liberada. Luego la compañía retomará su anterior obra, 'Perejil, la huella de una historia', ganadora de una itinerancia regional. J

La Quinta de los Núñez

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El concepto que ya hemos descrito como picada involucra más que una comida, un plato o un servicio, sino que incluye eso 'todo junto' y mucho más. Cuando nos encontramos con todo ello, pasa a ser una experiencia que nos llama la atención y que nos deja un gusto y un relato que compartir. Ese es el problema cuando ese relato no está y quedamos al debe con una o más de estas características; el 'cuento no tiene final feliz'. Una ramada con un preámbulo tan rústico como perfecto que nos lleva a iniciar un aventura por calles pequeñas, caminitos y un patio que sorprende, dando pie a abrir mi imaginación y esperar todo lo que comentamos en el principio.

Si debemos comentar que para poder entrar debemos hacer reservas con tiempo, lo que contribuye al alimentar las ganas y la expectativa, porqué tanto tiempo de espera y tanta gente quiere compartir esto que nos vuelve a prender en emoción. Lamentablemente este relato no es acompañado por una excelente experiencia culinaria, y nos decepcionamos en sentirnos mal atendidos y llevados a un segundo plano que nos dolió en el alma, pues quedamos por la cantidad de gente en una cancha como el segundo salón donde no vemos el Show y no disfrutamos de lo mejor de esta visita.

En lo gastronómico, probamos solo tres productos, que no cumplieron las expectativas, menos el servicio que los acompañó. Costillar, que extrañamente las porciones eran muy dispares, de buena calidad y sabor, algo secos, pero correctos, sólo nos llamó la atención que la garzona al darse cuenta de la diferencia nos dijera con bastante picardía 'ahí se las reparten'.

Empanadas, que cumplían lo normal, buena masa aunque algo gruesa, buena cantidad de pino y de buen aspecto y sabor, normales, sin nada que nos sorprenda. Pescado frito, que lamentablemente notaba poca cantidad de aceite en la cocción, y un aceite poco limpio, ya que tenía pegadas trozos de batido quemado seguramente del pescado anterior, y la base quemada como si fuera de un metal, es decir, poco aceite y sucio, lo que obviamente deja mucho que desear. Además, todo este pedido llega cerca de 40 minutos después de ser emitido. No solo es criticar por criticar, sino que la experiencia y la entretención de un inicio no se condicen con el final y la mala experiencia general. Lamentablemente nos deja un sabor amargo que no queremos repetir.