En tragedia finalizó una jornada de cacería de un grupo de amigos de Concón, luego que uno de ellos matara a otro de un escopetazo.

El subprefecto José Ortiz, jefe de la Brigada de Homicidios de Valparaíso, contó que el hecho aconteció de madrugada en el fundo Santa Luisa de Quintero, donde cuatro amigos cazaban conejos.

Cuando los hombres se dirigían a sus vehículos para retornar a sus casas, ocurrió lo impensado. 'Uno de ellos comenzó a desarmar la escopeta para guardarla y se le resbaló de las manos. Al tratar de retomarla accionó el disparador. A su lado se encontraba uno de sus compañeros y le impactó directamente en la cabeza', dijo el jefe policial.

Los perdigones calibre 12 se alojaron en la región temporal parietal, y le provocaron la muerte inmediata, pese a que dos testigos salieron raudamente a buscar ayuda del Samu y Carabineros, los que constataron el deceso.

La víctima fatal fue identificada como Claudio Andrés Acosta Morales, de 35 años, del sector de Circunvalación en Concón. La Fiscalía dejó el caso en manos de la BH, que acudió a las primeras diligencias. El subprefecto José Ortiz mencionó que el análisis científico al sitio del suceso, que incluyó toma de muestras de residuos y peritajes balísticos, concordó con los descrito en las declaraciones por el autor del disparo, B.S.M.O., de 25 años, y los otros dos testigos, en orden a que se trató de un hecho accidental, sin que hubiera una intención de provocar daño.

No obstante la investigación determinará el curso de los hechos, considerando que el responsable fue llevado a la justicia para ser formalizado por el homicidio. Se verificó que el imputado y los otros cazadores tenían los permisos para el porte de las armas y la ejecución de la actividad deportiva. J

l Un lamentable hecho de maltrato animal quedó al descubierto luego que un vecino reclamara por una gran cuenta de luz. Según Juan Pablo Oróstica, director ejecutivo de la asociación 'Nueva Justicia Animal' (NJA), entre 2 y 3 Oriente, Viña del Mar, dos perritos bóxer permanecían encerrados en un sótano, sin acceso a comida ni agua. 'Los perros fueron encontrados de manera fortuita pues la casa en donde estaban comparte la cuenta de luz con otra vivienda. Entonces como la cuenta que comparten había salido muy alta, el papá de la otra vivienda se acercó a reclamar y lo atendió el hijo del corredor de propiedades. Ahí el hombre pidió explicaciones por la cuenta, hasta que salió el tema de los perros y se enteró que estaban encerrados ahí, muy desnutridos', explicó Oróstica.

La hija de la persona que reclamó y que prefiere no dar nombres ni entrevistas por temor a represalias, estaba desde hace tiempo preocupada por los perros porque de un momento a otro los dejó de ver.

'Los responsables tenían a los perros para reproducción y como no estaban en su época, seguramente los dejaron encerrados y sin dedicación. Las perras cuando dan a luz adelgazan un poco, pero las condiciones en que estaba el macho no tienen relación con el alumbramiento de la perra', detalló Oróstica.

Dijo que la hija del denunciante estaba preocupada pues antes los vecinos habían teñido de morado a un poodle.

Ante este panorama, Juan Carlos Oróstica presentará una denuncia por maltrato animal el próximo miércoles en la fiscalía de Viña del Mar. Los perritos ahora están en buenas manos, pero separados: uno a Santiago y otro quedó en la Ciudad Jardín. J