Un estudio realizado por la Universidad de Yale y Buffalo en Estados Unidos, menciona que las parejas que fuman marihuana tienden a sufrir menos violencia doméstica.
Un total de 634 parejas fueron analizadas por un periodo de nueve años para un estudio de Philip H. Smith y Kenneth Leonard. Los investigadores preguntaron a los participantes sobre el uso de drogas, alcohol y la cantidad de problemas (violentos) con sus parejas.
El estudio publicado en la revista Psychology of Addictive Behaviors reveló que el consumo de cannabis disminuye la violencia que pudiera presentarse en las relaciones amorosas. Los autores del estudio mencionaron que las parejas que consumen marihuana de dos a tres veces por semana muestran tasas más bajas de problemas maritales.
Los expertos suponen que el relajo al que induce este sicotrópico, la sensación de paz etérea y el producir un sentido del humor potenciado, todo eso interviene en un clima de armonía profunda.
Tampoco, aclararon, se trata que la marihuana sea la solución mágica para parejas en crisis. El uso marital de la cannabis no hace a la pareja inmune al divorcio. Pero, por sus efectos y, además, por el rito de conversación que implica el fumar marihuana, resulta un aporte constructivo a una pareja que no vea con malos ojos este consumo. Es decir, una pareja liberal, cultora de esta yerba, y que se lleve bien, con marihuana se llevará mejor.
Los especialistas, por otra parte, agregaron que 'las parejas que fuman marihuana juntos, comparten los mismos valores y círculos sociales'.
Por todo lo expuesto, los peritos concluyen que la cannabis aporta para el fomento de la afinidad. Aporte, entonces, para que disminuyan los conflictos. Y para que no exista, bajo ningún contexto, violencia doméstica. J