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Jardín infantil 'Papelucho' de Casablanca

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Soy apoderada de Jardín Infantil Papelucho, financiamiento Junji por VTF. El día 25 de agosto al dejar a mi hija de dos años, constaté con sorpresa que la sala en la cual desarrollan los párvulos sus actividades se encontraba inundada.

Dirigí misiva al departamento de Obras de la Ilustre Municipalidad de Casablanca, administradora de los fondos del jardín infantil y responsable de su infraestructura, a la que siguió una carta a OIRS y a DAEM de dicho municipio.

Sólo respondió departamento de Obras, informándome que cualquier comunicación debía canalizarla a través de DAEM.

Y esta semana de lluvia nuevamente la sala se inundó, por lo que niñas y niños han debido migrar de una dependencia a otra al interior del jardín, en un esfuerzo del personal del establecimiento para que no queden sin atención, en consideración a que varios de ellos -entre los cuales está mi hijita- no cuentan con más red que la madre trabajadora.

No es la primera vez que esta situación se presenta, informándome la directora del establecimiento que se había dado cuenta a la dirección de obras de la municipalidad y que se encontraban a la espera de una solución, que a simple vista es reparación estructural.

Creo que el estado en el cual se encuentra esta sala constituye vulneración de derechos de infancia.

Karen Zelaya Latham

Feriantes de avenida Argentina

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Respecto a la mala situación económica de los feriantes, creo que hace falta una auto crítica entre ellos, porque lo que venden frutas y verduras son productos de fácil venta, entonces qué está pasando. Algo está faltando: honradez y amabilidad de algunos locatarios. Las señoras no se encuentran seguras comprando y la delincuencia ¿cómo está? yo creo que el gobierno lo apoyaría si presentan un lindo proyecto techado, que la gente no se moje cuando llueva y no se acalore en verano. Están pidiendo rebajas en las patentes y aseo. Ojalá que así sea, pero no les va a resolver el problema. Lo que da rabia es lo que pagan de patente los mall y supermercados.

Víctor Vera Urtubia