Minutos de terror provocó balacera en el centro de Viña
"Mi papito, quiero a mi papito", decían en llanto dos pequeños niños de unos 5 y 8 años, tras presenciar la detención de su padre por personal de la Brigada Antinarcóticos de la PDI Metropolitana, en conjunto con la Briant porteña. Los policías habían observado una transacción de drogas entre el sujeto, que lo hizo acompañado de los menores, y otras dos personas que se movilizaban a bordo de un vehículo marca Kia de color gris.
El hecho ocurrió a eso de las 13.30 horas de ayer, en la intersección de calles Alvares con Agua Santa cuando el papá de los dos pequeños abordó el vehículo con las manos cargadas y a los pocos minutos, lo abandonó con las manos vacías.
Todo esto mientras personal de la PDI los observaban desde cerca. Fue una cuadra más allá, en Alvares con Von Schroeders cuando el vehículo se detuvo en la luz roja del semáforo, momento que fue aprovechado por los policías para efectuar un control de identidad.
"Al momento del control, el chofer del vehículo, al verse sorprendido por la policía, le toma el arma de servicio al policía y lo intenta atacar. Hay un forcejeo. Hay un par de disparos de advertencia al aire y gracias al profesionalismo, se logró la detención de estas personas y la incautación de más de 38 kilos de droga", explicó el comisario Pedro Muñoz, jefe de la Brigada Antinarcóticos de Valparaíso.
En forma paralela, otro grupo de investigadores ingresaron hacia calle Von Schroeders y detectaron el vehículo del proveedor de la droga en instantes que ingresaba a un edificio de departamentos. Fue ahí donde se produjo la tercera detención del sujeto que había hecho el negocio acompañado de sus pequeños hijos.
Los tres individuos, todos domiciliados en la Ciudad Jardín, fueron llevados a constatar lesiones, luego fueron trasladados al cuartel de la Bicrim de la PDI de Viña del Mar y de ahí salieron hacia Santiago, donde se les realizaría hoy el control de detención en la fiscalía Metropolitana Sur.