Barrio Puerto, ad portas de una gran renovación
"No voy a descansar hasta que vea convertido el Barrio Puerto en Venecia", dice derrochando entusiasmo, Gonzalo Cowley, co fundador de la Corporación La Matriz, una de las instituciones que hace unos años apostó por recuperar el abandonado entorno de la tradicional iglesia, objetivo que se ve cada día más cercano, gracias a varios proyectos públicos y privados en marcha y que incluyen nuevas construcciones, remodelaciones y mejoras en espacios públicos.
El empeño de devolverle el sitial al barrio fundacional de Valparaíso, no es nuevo. Varias autoridades y profesionales han hecho aportes, pero al no existir una política pública clara y a largo plazo para desarrollar en el sector, todos los esfuerzos han tenido un impacto menor.
Pero este año, como nunca, son varias las entidades que decidieron pasar por alto la mala fama del Barrio Puerto y optaron por instalar ahí sus edificios institucionales: la poderosa agencia marítima Ultramar pondrá sus casa matriz en el edificio Astoreca (ubicado frente a la plaza Echaurren) y además construirá otro en un sitio eriazo vecino; el ministerio de Vivienda recuperará el Palacio Subercaseaux que resultó dañado con la explosión en calle Serrano y el Centro Interdisciplinario de Neurociencia de Valparaíso (CINV), construirá sus nuevas instalaciones en el ex edificio Severín, hoy bautizado como Juan Ignacio Molina.
La Aduana también tiene un proyecto de nuevo edificio (pero hasta ahora no ha logrado reunir el presupuesto para levantarlo) y Bienes Nacionales le cedió a la Fundación Santos Chávez una propiedad en calle Cajilla, donde se instalará un museo dedicado a la obra del grabador mapuche.
Además, la municipalidad de Valparaíso tiene varios proyectos esperando aprobación. El más emblemático es la habilitación del Mercado Puerto, cerrado luego del terremoto del 2010. En carpeta también está la remodelación de la Plaza Sotomayor, el mejoramiento del edificio del bar Liberty (para instalar ahí oficinas municipales y tal vez un museo de la ciudad) y varias obras para convertir el museo Lord Cochrane, en el gran centro de eventos de Valparaíso.
Juan Carlos García, gerente de CINV, destaca: "Las instituciones están haciendo su parte del trabajo. Que vuelva gente a trabajar, en disciplinas distintas, sin duda ayuda mucho al barrio porque empieza a generar movimiento, el comercio se empieza a favorecer. Pero creo que al Estado también le toca hacer lo suyo y le corresponde recuperar y poner en valor los espacios públicos".
recuperación social
"La Fundación La Matriz se hizo para promover la rehabilitación social, urbana, económica y cultural del Barrio Puerto. El rol central que ha jugado es el de relevar el sector, poner la discusión sobre la mesa y lo hemos logrado, estamos súper satisfechos. Era un barrio completamente invisibilizado, era una isla urbana en el plan de Valparaíso, la gente lo evita, pero sin embargo es el barrio fundacional, el centro histórico de la ciudad y el corazón de la declaratoria como Patrimonio de la Humanidad", comenta Cowley.
En el Barrio Puerto funcionó el primer Congreso de Chile y el primer diario de habla hispana.
Un punto fundamental para la Corporación La Matriz es la recuperación social de quienes viven ahí, que a pesar de no ser muchos, las condiciones de habitabilidad son muy precarias. "Tenemos varios proyectos, está Futvalores que a través del fútbol desarrolla una metodología para la formación y entrega de valores a los niños; también están Matriz Emprendimiento, con proyectos que hemos realizando con el apoyo de Corfo y Matriz Sustentable, a través del cual instalamos en primer Punto Limpio en el atrio de la iglesia", dijo.
En esta corporación han querido cambiar el eslogan. En vez de Patrimonio de la Humanidad, darle humanidad al patrimonio. "La idea es poner a las personas al centro de la recuperación, que sea un desarrollo a escala que no expulse a las personas, sino que las incorpore en el proceso de desarrollo", advierte Cowley.
nuevos edificios
Actualmente son tres los edificios que están en etapa de desarrollo de proyecto. Uno de ellos recupera el edificio Subercaseaux de calle Serrano, el que data de 1895 y del que hoy sólo se mantiene en pie parte de su fachada, ya que resultó gravemente dañado para la explosión del 3 de febrero del 2007.
Según explicó el seremi de Vivienda, Mauricio Candia, para el Minvu la iniciativa no sólo busca generar mejoras en el funcionamiento e infraestructura institucional, sino además, ser un aporte a la ciudad. De esa manera, el edificio se transformó en una oportunidad de aportar a la recuperación del Barrio Puerto.
El costo estimado es de $6.608 millones. Tendrá una superficie de 7.100 metros cuadrados, 5 pisos sobre el nivel del mar y otros tres subterráneos para estacionamientos, con espacio para que se desempeñen 500 funcionarios. Actualmente se encuentra la etapa de contratación de diseño.
La otra obra que ha causado gran revuelo tras su anuncio, es la recuperación del edificio Astoreca que realizará la empresa Ultramar y que implica cambiarle la cara a dos manzanas del Barrio Puerto, ya que además incluye la construcción de un nuevo edificio en un sitio eriazo ubicado justo al frente, entre San Martín y Clave. Ambos están en la etapa de diseño de proyecto.
En la empresa señalaron que el diseño del nuevo edificio estará a cargo del Premio Nacional de Arquitectura 2010, Enrique Browne. Además se contempla la elaboración de un estudio urbano y de propuestas destinadas a potenciar la zona completa.
el ex congreso
El gerente del CINV cuenta los detalles de la intervención que tendrá el ex edificio Severín -donde funcionara el primer Congreso de Chile- y que próximamente recibirá a científicos, académicos, estudiantes y candidatos a doctorado.
"El edificio Juan Ignacio Molina es un proyecto para trasladar al corazón del Barrio Puerto el quehacer del centro que hoy se encuentra ubicado en Playa Ancha. Ya está con recomendación técnica, tiene parte del presupuesto ya comprometido por el ministerio de Obras Públicas y la Universidad de Valparaíso. Nos falta la ratificación de los consejeros regionales para el aporte de la Subdere. En total son $5 mil millones, es la inversión pública vigente más grande que hay en el Barrio Puerto", explicó.
Se espera que a mediados del próximo año comience su construcción. El propósito es mantener y poner en valor la fachada del inmueble (lo único que se mantiene en pie del original). Tendrá dos áreas, una de uso exclusivo para funcionarios y académicos -con salas, oficinas y laboratorios- la parte delantera será de uso público.
García destaca: "Vamos a tener una sala de exposiciones, un auditorio para doscientas personas y una cafetería. La idea es que desde la plaza uno vea, de alguna manera, el edificio que siempre estuvo, lo que la gente del barrio quiere, como recuperar el torreón".
Sobre las razones de apostar por esta zona de la ciudad, García manifestó que "tenemos una convicción absoluta de que podemos ser un aporte para Valparaíso. La Universidad ya instaló la Facultad de Humanidades en calle Serrano y nosotros como centro reflexionamos sobre dónde podríamos ser el mejor aporte: en el barrio donde nadie se quiere ir, dar una señal de que sí se pueden hacer cambios. Los científicos siempre buscan correr los cercos, esto es lo mismo, pero a nivel de ciudad. Creemos que hay un compromiso, la ciencia no busca recursos para sus propios proyectos, también tiene que entregar a la ciudad, por eso nos fuimos a un barrio que dicen es el peor de todos, pero nosotros creemos que es el mejor". J