Para algunos era crónica de una muerte anunciada. Los dirigentes de los gendarmes llevaban semanas protestando y exigiendo la remoción del alcaide del complejo penitenciario porteño, y esto se concretó ayer tras un nuevo asesinato en el penal, el segundo en menos de tres días y el décimo del año.
Pasadas las 09.00 horas tras el desencierro de los internos del módulo 104, en el patio se produjo una riña entre dos de ellos, donde el más perjudicado fue Nicolás Carlos Arenas Arenas, 21 años, condenado por robo con violencia, quien recibió una herida penetrante en el tórax que alcanzó su corazón, por lo que fue llevado al hospital de Gendarmería.
Por la gravedad de la lesión fue derivado al Van Buren, donde los esfuerzos médicos por reanimarlo resultaron infructuosos, falleciendo antes del mediodía. Gendarmería identificó al agresor, que deberá responder ante la Fiscalía. Cabe recordar que el lunes en la tarde, en el mismo módulo 104, hubo otra pelea entre dos internos, donde Juan Antonio Muñoz, de 26 años, alías "El Chino", recibió un puntazo en la zona cardiaca, falleciendo en el lugar.
el 104
De esta forma en el 104, uno de los más conflictivos, hubo dos asesinatos en menos de tres días. Este hecho de sangre fue la gota que rebasó el vaso para el director regional de Gendarmería, Ricardo Quintana, que dispuso la remoción del alcaide, coronel Jorge Reyes. "Lamentar profundamente el deceso de un interno, de un problema puntual de enfrentamiento con otro. A raíz de esa situación, y por los hechos conocidos por la opinión pública, he tomado la decisión en conjunto con el mando institucional de relevar de su puesto al actual jefe del complejo", sostuvo.
En forma transitoria el coronel Walter Muñoz, alcaide de la cárcel de Los Andes, asumirá la jefatura del penal porteño, con la instrucción de maximizar la seguridad y control. El módulo 104 será intervenido para identificar a los líderes negativos, los que serían derivados a otras unidades para minimizar los riesgos de enfrentamientos. J