Secciones

Colectivos son un calvario para vecinos de Curauma y Placilla

E-mail Compartir

Las quejas de los vecinos de Placilla y Curauma son múltiples. La principal, que en las horas punta cuesta demasiado tomar colectivo tanto para viajar hacia el centro de Valparaíso en las mañanas como para regresar en las tardes a los respectivos hogares. Y lo más complejo: que entre las 22 y las 23 horas los vehículos desaparecen de la plaza Victoria para volver más tarde y poder cobrar así la tarifa nocturna de $1.500.

Actualmente son tres líneas de colectivos las que funcionan: 74, 78 y 133, las que se complementan con los servicios de autobuses 901, 902, 001 y 002. Pasaje diurno en los vehículos alcanza los $800 mientras que de la micro es de $480.

Los problemas con el servicio de colectivos fueron denunciados por Miguel Ramírez, vecino de la población Invica en Placilla, quien destacó que "en la mañana, entre 7.30 y 9.00 y en las tardes desde las 18.00 hasta las 20.00 horas, es casi un milagro poder encontrar un vehículo en los paraderos respectivos, particularmente en el ubicado en Plaza Victoria. En Placilla y Curauma los paraderos casi no existen, y los pocos que hay (sobre todo en lugares como Curauma e Invica) habitualmente están atestados de público".

Este vecino también denunció la mala práctica de algunos choferes, quienes con el fin de cobrar la tarifa nocturna (que empieza a regir a las 23 horas y tiene un valor de $1.500) simplemente desaparecen alrededor de las 22 horas.

"Por cualquier placillano es conocido el hecho de que estas líneas de colectivos son de las pocas que en el Gran Valparaíso suben a tarifa nocturna a contar de las 23 horas y que desde las 22.40 muchos de estos vehículos desaparecen de los paraderos y vuelven a las 23 para cobrar la tarifa reajustada", aseguró Ramírez.

De hecho un chofer, que prefirió no identificarse, reconoció que esta era una práctica habitual de algunos colegas. "El problema es que los dueños de los vehículos piden una guía de $26.500 diarios y a veces esa meta no se puede cumplir, hay que hacer malabares, porque en las noches los autos suben llenos, pero nadie baja...".

Según este mismo conductor un vehículo que cubre Curauma-Plaza Victoria recorre cerca de 500 kilómetros diarios. "Es como ir a La Serena todos los días", advierte. Y en muchos pasajes del viaje diario los autos van desocupados.

buen servicio

Sobre las denuncias, Luis Maldonado, presidente de la Línea 74 y dirigente del Sindicato de Colectivos Placilla, comentó que están conscientes de la falta de vehículos en las horas punta y explicó que se debe a la restricción vehicular. "Hemos tenido conversaciones con el seremi de Transportes para ver si es posible que nos suspenda la restricción vehicular en las horas punta, o sea que trabajemos hasta las diez en las mañanas y empecemos a las 18 horas de nuevo. Cada línea se queda con veinte autos parados cada día".

La flota de colectivos Placilla-Curauma actualmente alcanza los 85 vehículos (entre las tres líneas), los que no dan abasto en las horas de mayor requerimientos de los pasajeros.

Sobre los problemas por el horario nocturno, Maldonado comentó que "como Curauma es una ciudad dormitorio la gente en las noches sólo sube a dormir, casi nadie baja. Y con los problemas que tenemos por el alza de los combustibles, es difícil mantener que el vehículo circule vacío. La verdad es que es complicado mantener un buen servicio, nosotros tratamos". J